Primavera Árabe y crisis económica marcan agenda de ASPA
Los países sudamericanos pidieron soluciones conjuntas para recomponer la economía mundial y la no intervención en los conflictos de Medio Oriente y África. La demanda boliviana de una salida al mar y el asilo de Julian Assange también fueron tema de discusión en la III Cumbre de de América del Sur -Países Árabes que tiene lugar en Lima, Perú.
En su discurso en el foro político y económico que reúne a 34 jefes de Gobierno deSudamérica, el Magreb y Medio Oriente en Lima, la presidente de Brasil, DilmaRousseff, pidió a las naciones una mayor cooperación y desarrollo en materia de educación, ciencia, tecnología, economía y política.
“Nuestro mundo pasa por grandes transformaciones, la crisis económica persistente nos está proponiendo nuevos retos. Necesitamos asegurar que la turbulencia de la economía no cree obstáculos a nuestro desarrollo”, señaló.
Rousseff insistió en “la necesidad de reforzar la economía y la cooperación”. Alertó también de que “un proteccionismo disfrazado se está imponiendo para reducir la exportaciones” de los países de la región.
Sobre la crisis económica también habló la mandataria argentina, Cristina Kirchner, quien consideró que el problema “no va a resolverse en el corto o en el mediano plazo”.
“Las medidas de los países desarrollados no están haciendo más que agravarla y terminará impactando en las economías emergentes, con menor crecimiento de la economía, menor nivel de importaciones”, declaró durante su alocución.
Como en sus últimas intervenciones en foros internacionales, Kirchner reiteró sus críticas hacia el Fondo Monetario Internacional (FMI) y exigió “una Organización Mundial del Comercio (OMC) más justa”.
“Se nos acusa de proteccionismo en paneles donde, de 24 integrantes, 22 pertenecen a países desarrollados que tienen barreras arancelarias”, denunció.
Los conflictos en los países árabes también fueron tema de agenda entre los mandatarios y jefes de Estado reunidos en Lima. Al respecto, Rousseff reiteró el apoyo a “los esfuerzos de la Liga Árabe a favor de una solución negociada”.
Sobre Siria, deseó que “todos los involucrados acepten el camino del diálogo, que es el camino de la paz en la región”, mientras que opinó que en países como Libia e Irak es necesario que la construcción de sus Gobiernos “pase por ellos mismos”.
Además, repudió los actos de violencia y terrorismo contra sedes de los EstadosUnidos, Alemania y otras naciones occidentales.
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