La justicia rusa definirá este miércoles el futuro de las Pussy Riot
La corte aplazó el pasado 1 de octubre la vista sobre la apelación a la condena de 2 años después de que una de las integrantes del grupo punk, Yekaterina Samutsévich, rechazara que sus actuales abogados siguieran defendiendo sus intereses.
El tribunal municipal de Moscú estudiará este miércoles el recurso de casación interpuesto por la defensa de las tres jóvenes del grupo punk rusoPussy Riot condenadas a dos años de cárcel después de cantar en una catedral de Moscú.
Precisamente, uno de los abogados del grupo, Mark Feiguin, denunció este martes que juristas visitan diariamente la prisión donde se encuentran las tres jóvenes para ofrecerles sus servicios y renuncien a su actual defensa.
“Incluso hoy, en víspera de la vista de casación, han recibido la visita de un nuevo abogado” dijo y precisó que si bien ellas los han rechazado, ellos “siguen viniendo”.
Precisamente, Pussy Riot fue elegido hoy como finalista al Premio Sájarov a la Libertad de Conciencia del Parlamento Europeo, nominación que había sido tachada en su momento de injerencia por las autoridades rusas.
La defensa de las tres mujeres acusó esta semana al presidente ruso, Vladímir Putin, de presionar a los tribunales al aludir al caso el domingo con ocasión de su 60 cumpleaños.
“Vemos las palabras del presidente sobre las chicas en vísperas de la vista de nuestro recurso como una presión sobre la instancia de casación”, dijo la abogada Violetta Vólkova.
Vólkova aseguró que “hacer tales declaraciones, más aún días antes de una vista judicial, es inadmisible para el jefe del Estado”.
“‘Las llevaron al tribunal, les metieron un par de años’, esas son expresiones barriobajeras, jerga, que es inaceptable para su cargo”, dijo.
En opinión de la abogada, “con sus declaraciones el presidente demostró que apoya la sentencia dictada contra las integrantes de Pussy Riot y que no hay que revisarla”.
La defensa de Samutsévich, Nadezhda Tolokónnikova y María Aliójinamantiene mantiene que en su actuación no hay objeto de delito y está dispuesta a recurrir al tribunal de derechos humanos de Estrasburgo.
La Iglesia Ortodoxa Rusa pidió recientemente a la Justicia rusa que tenga clemencia con las tres condenadas por “vandalismo motivado por odio religioso” si muestran arrepentimiento por lo que han hecho.
No obstante, los abogados del grupo ya han insistido que las jóvenes mantienen que su actuación fue política y no estaba dirigida contra la Iglesia y los creyentes, por lo que no están dispuestas a reconocer su culpabilidad.
Las Pussy Riot se dieron a conocer el 21 de febrero, cuando cinco de sus integrantes irrumpieron encapuchadas en una zona restringida del altar de la catedral de Cristo Salvador de la capital rusa.
“Madre de Dios, echa a Putin”, decía la canción cuyo vídeo fue ampliamente difundido en internet y en la que se acusaba al patriarca de la Iglesia Ortodoxa Rusa, Kiril, de creer en el presidente de Rusia y no en Dios.