Recrudece crisis en Egipto: Ejército despliega tanques fuera del palacio presidencial
El presidente, Mohamed Mursi, se reunió con el jefe del Estado Mayor y de la Inteligencia, para analizar cómo enfrentar el estallido de violencia en su contra.Los opositores convocaron a tres marchas para hoy en protesta a los ataques de ayer de "milicias" de los Hermanos Musulmanes.
Mientras la batalla campal desatada este miércoles en los alrededores del palacio presidencial de Ittihadiya en El Cairo ya ha dejado al menos cinco muertos por disparos de armas de fuego, otras 446 personas han resultado heridas, la tensión no hace más que aumentar. De hecho la Armada egipcia optó por desplegar varios tanques frente al edificio.
Tres carros de combate pesados y otros tres blindados ligeros se han situado delante de la entrada del complejo presidencial, en el barrio de Heliopolis, donde varios centenares de partidarios del presidente siguen manifestándose a primera hora de este jueves.
Ante la gravedad de la situación, el presidente islamista, Mohamed Mursi, se reunió hoy con el jefe del Estado Mayor y de la Guardia Republicana, Mohamed Zaki, con el director de la Inteligencia, Rafaat Shehata, y con varios ministros para analizar la crisis actual en el país.
El portavoz de la presidencia, Yaser Ali, explicó que durante la reunión estudiaron también el último estallido de violencia en el país entre detractores y seguidores de Mursi, y la forma de abordar la situación desde el punto de vista de la seguridad, político y legal para conseguir la estabilidad, según la agencia Mena.
Igualmente se espera que Mursi pronuncie un discurso abordando la crisis política que se desató hace dos semanas, justo después de que blindara sus poderes ante la Justicia y convocara recientemente un referéndum sobre la nueva Constitución. A su turno, los opositores han convocado tres marchas para hoy hacia el palacio presidencial, en protesta contra lo que consideran los ataques de ayer de “milicias” de los Hermanos Musulmanes.
Lucha cuerpo a cuerpo y llamados a la calma
Los enfrentamientos comenzaron cuando un grupo de simpatizantes de Mursi irrumpió en la zona donde acampaban los opositores y levantó sus carpas. Se han producido choques entre partidarios y detractores, en los que se han arrojado bombas incendiarias y piedras, y Varios vehículos han sido incendiados.
Los partidarios de ambos bandos se han enzarzado en peleas cuerpo a cuerpo, mientras las ambulancias evacuaban a los heridos.
Para calmar los ánimos, el primer ministro egipcio, Hisham Qandil, ha pedido en una declaración institucional a “todos los manifestantes” en torno al Palacio Presidencial que abandonen la zona de inmediato para que se facilite el regreso de la calma.
Qandil reclamó la vuelta a la tranquilidad “para dar la oportunidad a los esfuerzos que se están llevando a cabo actualmente, para comenzar un diálogo nacional y salir de la crisis política actual”, informa Efe.
Horas antes, el jeque de Al Azhar, la principal institución islámica de Egipto, Ahmed al Tayeb, también pidió a todos los egipcios, “cualquiera que sea su filiación”, que se contengan y recurran al “diálogo pacífico y civilizado que corresponde a Egipto y los egipcios”.
Anoche varias y multitudinarias marchas confluyeron en las inmediaciones del recinto presidencial para denunciar el “autoritarismo” del blindaje presidencial y la nueva Constitución que será sometida a referéndum el próximo 15 de diciembre.
La imagen de miles de personas rodeando el complejo palaciego animó a la oposición a proseguir con las protestas. El Partido de la Constitución, liderado por el premio Nobel de la Paz Mohamed el Baradei, llamó a mantener la acampada en los alrededores del palacio de Ittihadiya -en el barrio cairota de Heliópolis- hasta el próximo viernes, sin desmovilizar el otro corazón de los detractores del presidente Mohamed Mursi: la simbólica y céntrica plaza Tahrir.
Por su parte, la ONU ha hecho un llamamiento al “diálogo” en Egipto para resolver las diferencias y pidió que las protestas entre partidarios y detractores del presidente, Mohamed Mursi, se lleven a cabo de manera “pacífica”.