Ex viceprimer ministro británico admite que la guerra de Irak fue un error
En vísperas del 10º aniversario de la invasión, el "número dos" en los gobiernos de Tony Blair, John Prescott, reconoció que el conflicto que en su momento apoyó, "no estuvo justificada".
El ex viceprimer ministro laborista John Prescott, “número dos” en los gobiernos de Tony Blair, ha admitido que la guerra de Irak, que en su momento apoyó, “no estuvo justificada”.
En vísperas de que el 20 de marzo se cumpla una década de la invasión, Prescott ha declarado a la cadena pública BBC que esta fue un error y que él decidió apoyarla porque creía que el presidente de Estados Unidos, George Bush, tenía una estrategia para impulsar el proceso de paz entre Israel y Palestina.
Prescott, viceprimer ministro de 1997 a 2007, reconoció que no puede “desmarcarse” de la decisión de atacar Irak en coalición con EE.UU pero afirma que, tras pensarlo mucho, ha concluido que “la intervención no estuvo justificada”.
Sin embargo, el ex primer ministro Tony Blair, que gobernó en el mismo periodo, defendió la decisión de intervenir en otro programa televisivo de la BBC emitido el pasado martes con motivo del aniversario del conflicto.
“Si no hubiéramos derrocado a Sadam (Husein, ex presidente iraquí) pensad por ejemplo ¿qué estaría pasando si estas revoluciones árabes continuaran y Sadam, que era probablemente veinte veces peor que (Bachar al) Asad en Siria, estuviera intentando suprimirlas?”, planteó Blair en “Newsnight”.
“Piensen en las consecuencias de dejar ese régimen en el poder”, insistió el actual enviado especial internacional para Oriente Medio.
A días de que se cumplan los diez años de la invasión, iniciada el 20 de marzo de 2003, el ministro británico de Exteriores, William Hague, ha escrito a sus colegas en el Gabinete para instarles a que no se pronuncien sobre los motivos o justificación de la guerra, según la BBC.
La razón aducida es que aún no se han presentado las conclusiones de la investigación efectuada entre 2009 y 2011 por el juez John Chilcot sobre las causas que llevaron a intervenir, que podrían darse a conocer a finales de este año.
De los tres principales partidos políticos británicos, solo los liberaldemócratas se opusieron a la intervención, lo que les impulsó en las urnas, mientras que los conservadores -actualmente en el Gobierno en coalición con los liberaldemócratas- y los laboristas la apoyaron.
Un total de 179 soldados británicos perdieron la vida en el conflicto, hasta la retirada de las tropas del Reino Unido del país árabe en abril de 2009.