Obama homenajea a soldados fallecidos en víspera del día de Los Caídos
El presidente de Estados Unidos recordó a los ciudadanos estadounidenses fallecidos en el campo de batalla, en su alocución semanal, dedicada en esta ocasión a la festividad que se celebra este lunes en el país.
El presidente estadounidense quiso recordar “a todos y cada uno” de aquellos que “dieron la vida” por EE.UU., a quienes calificó de “héroes” y de quien dijo “defendieron sus ideales de libertad y justicia” para hacer del país “un faro de esperanza en el mundo”.
“Dieron a Estados Unidos lo más preciado que tenían: su última y definitiva muestra de devoción. Y debido a que lo hicieron, somos quienes somos actualmente; una nación libre y próspera, la más extraordinaria del mundo”, aseguró el presidente.
Obama se dirigió a la nación después de que esta semana ofreciera un discurso sobre su agenda en materia antiterrorista y tras asistir ayer a la ceremonia de graduación de los cadetes de la Academia Naval estadounidense para este 2013.
“Cada vez que ha surgido una amenaza, los estadounidenses se han puesto a la altura de las circunstancias para hacerle frente. Y, debido a esa valentía, a esa disposición a luchar, e incluso a morir, es que Estados Unidos perdura”, aseveró.
Obama se refirió también a los veteranos de guerra, muchos de los cuales recorrerán este fin de semana la capital estadounidense en diversos actos de reconocimiento a sus compañeros fallecidos.
“Tenemos que cerciorarnos de que todos los veteranos tengan el cuidado y los beneficios que se han ganado, y los empleos y la oportunidad que ellos merecen. Tenemos que ofrecer apoyo a las familias militares cuyos seres queridos están expuestos al peligro, ya que ellos también prestan servicios” al país, añadió.
“Y, sobre todas las cosas, tenemos que cerciorarnos de que los hombres y mujeres de nuestras fuerzas armadas tengan el apoyo que necesitan para lograr sus misiones de manera segura tanto en casa como en el extranjero”, insistió.
La festividad coincide este año con el décimo aniversario de la invasión anglo-estadounidense de Irak, que supuso la sangrienta caída del régimen de Sadam Husein.