Hermanos Musulmanes llaman a boicotear el referéndum constitucional de Egipto

El Partido Libertad y Justicia (PLJ), brazo político de los Hermanos Musulmanes de Egipto, llamó hoy a boicotear el próximo referéndum de la nueva Constitución, que consideró un texto “vacío de forma y contenido”.

El partido sostuvo en su página oficial de Facebook que el proyecto constitucional ha sido elaborado “por unos pocos que quieren facilitar el acceso al poder de los suyos, después de liderar un sangriento golpe de Estado y hacer que el pueblo egipcio pierda su voluntad y su dignidad”.

Los islamistas pidieron así el boicot a ese referéndum que se llevará a cabo los próximos 14 y 15 de enero, una actitud que contrasta con los llamamientos de las autoridades y fuerzas salafistas y no islamistas para votar a favor del texto.

La formación de los Hermanos criticó que un respaldo a la nueva Carta Magna sería como “encubrir todos los crímenes que se han producido en Egipto”, desde el derrocamiento militar del presidente Mohamed Mursi el pasado 3 de julio.

“El golpe invalidó la Constitución legítima, que fue aprobada por el pueblo (en 2012), y empujó a los egipcios a unas circunstancias excepcionales, a la pobreza y a la inseguridad”, señaló el PLJ.

El Partido Libertad y Justicia insistió en que “no ignorará la sangre derramada” desde la revuelta que desbancó del poder a Hosni Mubarak en febrero de 2011 y volvió a denunciar el reemplazo de un “gobierno democrático y legítimo” por otro “golpista”.

El referéndum constitucional forma parte del plan trazado por los militares con apoyo de otras fuerzas políticas, sociales y religiosas para lograr una transición política tras la destitución de Mursi.

El proyecto constitucional ha levantado polémica por la amplia autonomía que concede al Ejército que, además, tendrá el poder de elegir al ministro de Defensa durante los próximos ocho años.

Además, se ha enmendado el cariz islamista del anterior texto y, aunque los principios de la ley islámica siguen constituyendo la fuente principal de la legislación, su definición desaparece y su interpretación queda en manos del Constitucional.

Ajenos al nuevo proceso, los Hermanos Musulmanes y otros grupos afines siguen protestando en las calles en contra de lo que consideran un golpe de Estado y han denunciado la represión de las autoridades, que han procesado a sus principales dirigentes por incitar a la violencia y otros cargos.

Precisamente hoy, la Fiscalía anunció que Mursi y el líder de la cofradía, Mohamed Badía, entre otros dirigentes islamistas, serán juzgados por colaborar con organizaciones extranjeras para perpetrar acciones terroristas y divulgar secretos de Estado