A días del Mundial: huelga de autobuses en Sao Paulo afecta a millones personas
El secretario de Transportes de Sao Paulo no descarta castigar a las empresas de transporte que estén envueltas en la protesta.
La huelga de conductores de autobuses continuó hoy en Sao Paulo y varias terminales urbanas de la ciudad más poblada de Brasil quedaron cerradas, lo que provocó que por segundo día consecutivo millones de pasajeros no tuvieran acceso a este transporte público, informaron fuentes oficiales.
Sao Paulo amaneció con una sola terminal cerrada, aunque a medida que avanzaba el día otras terminales fueron paralizadas, como sucedió la víspera, cuando los conductores del servicio público paralizaron sin previo aviso la mitad de las terminales.
Según los medios de comunicación, unas 2,5 millones de personas se vieron afectadas por la paralización y los atascos en la metrópoli.
Ante esta situación, varias universidades de la capital paulista informaron a sus alumnos que no tendrán en cuenta la falta de asistencia a las aulas los días que dure la huelga debido a la ausencia de autobuses, mientras que otras fueron canceladas, según informaron a Efe algunos estudiantes.
Los autobuses bloquearon diferentes vías de Sao Paulo y complicaron la circulación en una ciudad que ya de por sí sufre problemas de congestión de tráfico, mientras que las ruedas de algunos vehículos fueron pinchadas con el fin de impedir su salida.
Desde las 7.00 hora local (10.00 GMT) fueron convocadas hasta 10 manifestaciones, según informó a Efe la Secretaría de Transportes de la ciudad de Sao Paulo.
La manifestación de conductores comenzó el martes después de que los trabajadores rechazaran un acuerdo firmado el lunes entre el sindicato que los representa y los propietarios de las empresas de transporte, por el que les fue concedido un aumento salarial del 10 %, frente al reajuste del 30 % que exigen.
El secretario de Transportes de Sao Paulo, Jilmar Tatto, afirmó que el ayuntamiento podrá castigar a las empresas de transporte que estén envueltas en la protesta.
Asimismo, según informó la Secretaría de Seguridad Pública, la Policía abrió una investigación para verificar si hubo delito en la manifestación, motivo por el cual los líderes del Sindicato de Conductores de Sao Paulo fueron llamados para prestar declaración.
De acuerdo con las mismas fuentes, la Policía Militar reforzó la vigilancia en todas las terminales de la capital y en lugares con gran concentración de personas para prevenir tumultos.
Esta huelga de autobuses coincide con una paralización anunciada para hoy por los detectives de la Policía Civil en cerca de diez de los 27 estados de Brasil, incluido Sao Paulo.
Ambas paralizaciones se producen a tres semanas del inicio del Mundial de Fútbol que Brasil organizará entre el 12 de junio y el 13 de julio y cuya proximidad ha sido aprovechada por los sindicatos para presionar a favor de sus reivindicaciones laborales.