Robin Williams: cuáles son las depresiones con más propensión al suicidio
Según datos de la Organización Mundial de la Salud, se registran un millón de muertes por esta enfermedad.
La tesis del suicidio se consolidó en el caso de la muerte de Robin Williams después de que las autoridades del condado de Marin, en el norte de California, revelaran que el cuerpo sin vida del actor fue encontrado ahorcado en un dormitorio y sin evidencias de violencia física.
El cadáver del ganador de un Óscar por “Good Will Hunting” fue hallado por su asistente poco antes del mediodía del lunes, ligeramente suspendido en el aire, colgado de la puerta de un armario por un cinturón que tenía amarrado alrededor de su cuello. También presentaba cortes en su muñeca.
De inmediato los cercanos al actor comentaron del difícil momento por el que pasaba Williams, principalmente relacionados con problemas de dinero y a una depresión que estaba siendo tratada.
Las cifras de la Organización Mundial de la Salud indican que más de 350 millones de personas sufren de esta enfermad en el mundo y que cada año un millón de personas se suicidan por ella.
“Hay distintos tipos de depresión: leve, moderada y severa. La moderada y la severa, que solía ser llamada clásicamente como melancolía, son las medicadas. A su vez hay depresión severa con o sin síntomas psicóticos“, señaló a la BBC el psiquiatra Roger Montenegro, miembro del consejo de dirección de la Fundación Mundial para la Salud Mental.
El especialista explicó que “hay una frecuente comorbilidad (presencia de uno o más trastornos), una coexistencia vinculada a otras enfermedades físicas o mentales” y que “el alcohol y las drogas hacen más viable la enfermedad, pero no sacan al enfermo, sino que terminan acentuando”.
Suicidios
La depresión avanzada, unida a otros síntomas, puede desencadenar intentos de quitarse la vida. El suicidio en contadas ocasiones es provocado por un solo factor y problemas económicos o las malas relaciones personales incrementan el sentimiento de desesperanza, dice la BBC.
“La incidencia de suicidios es mayor cuando la depresión no es tratada”, recalcó Montenegro, al tiempo en que aseguró que las personas suelen “dejar pistas” y en el 70% de las veces informa algunos días antes de sus intenciones.