Víctimas de tragedia industrial de Bhopal celebran revisión del Gobierno hindú
"Estamos más cerca de conseguir justicia", dijo una de las cinco supervivientes de la tragedia que mantenían una huelga de hambre desde el lunes Nueva Delhi.
Supervivientes de la fuga de gas de Bhopal, que causó miles de muertos en esa ciudad del centro de la India en 1984, celebraron hoy la decisión del Gobierno de revisar las compensaciones, cuando están a punto de cumplirse 30 años del mayor desastre industrial de la Historia del país.
El ministro indio de Químicos y Fertilizantes, Ananth Kumar, acordó un nuevo recuento de afectados y una revisión de su estatus en una reunión con cinco mujeres supervivientes de Bhopal que mantenían una huelga de hambre desde el lunes en Nueva Delhi, según informó hoy el líder de la ONG Grupo de Información y Acción de Bhopal, Satinah Sarangi.
“Hemos luchado mucho tiempo por esto. Estamos más cerca de conseguir justicia“, dijo a Efe una de las huelguistas, Shezadi Bee, que a sus 59 años aún recuerda la madrugada del 3 de diciembre de 1984, cuando se produjo el escape de gas. Su marido y sus hijos han sufrido problemas de salud desde entonces.
El nuevo recuento, acordado ayer, se llevará a cabo con los datos de los hospitales locales de Bhopal y del Consejo de Investigación Médica de la India, que, según los activistas, ofrecen cifras superiores de afectados de las utilizadas hasta ahora.
El 93 % de las alrededor de 500.000 personas que recibieron compensaciones obtuvieron 25.000 rupias (unos 400 dólares) por considerar que sufrieron “lesiones no permanentes”, de acuerdo con Sarangi.
El activista explicó que han acordado elevar esa cantidad a 100.000 rupias (1.600 dólares) si el nuevo recuento demuestra que sufrieron lesiones permanentes en el escape de gas en 1984 de una fábrica de pesticidas propiedad de Union Carbide India, adquirida posteriormente por la estadounidense Dow Chemical.
“Una persona que ha estado expuesta a isocianato de metilo (el gas filtrado) sufre lesiones permanentes”, dijo a Efe la activista Rachna Dhingra.
El Gobierno, además, revisará el número total de afectados y aumentará las compensaciones que exige a Union Carbide en un caso en el Tribunal Supremo de la India contra la compañía, según Dhingra.
Las autoridades indias exigen a Dow Chemical 1.200 millones de dólares, mientras que las víctimas piden que se aumente la cantidad a 8.100 millones de dólares.
El Ejecutivo considera que en la tragedia murieron 5.295 personas, 4.902 sufrieron incapacidad permanente y 42, heridas graves. Esas cifras se encuentran muy lejos de las estimaciones de las asociaciones de víctimas de 22.917 muertos, 508.432 casos de incapacidad permanente y 33.781 heridos graves.
La empresa Union Carbide India, que en el momento de la tragedia poseía y operaba la fábrica siniestrada, y el Gobierno indio, personado como demandante en un eterno proceso judicial, cerraron en 1989 un acuerdo de conciliación que convenía el pago de 470 millones de dólares.
En los años siguientes, diferentes organizaciones apelaron sin éxito la sentencia, que la estadounidense Corporación Union Carbide, dueña en 1984 del 51 % de UCIL, consideró el culmen de su “diligente trabajo para proporcionar ayuda a las víctimas”, según su página web dedicada a la tragedia.
El entonces presidente de UCC, Warren Anderson, abandonó la India tras el incidente y falleció el pasado 29 de septiembre, a los 92 años, sin haber sido juzgado.
“Es una iniciativa importante para subsanar los errores históricos que se han cometido en Bhopal“, afirmó Sarangi en referencia al acuerdo alcanzado hoy con el Gobierno indio, pero avisó que aún queda lucha por delante.
“Dow Chemical tiene que pagar compensaciones, limpiar la fábrica y los barrios de alrededor y hacerse cargo de los cuidados médicos que necesitan las víctimas, entre ellas los niños que han nacido posteriormente con problemas de salud”, subrayó el activista.