FOTOS | Las sorprendentes cirugías cerebrales de hace 2.300 años
La ciencia de la antigüedad sigue sorprendiendo hasta hoy, en especial los cirujanos que con primitivas herramientas lograban realizar intervenciones de alta complejidad.
Muchos de los logros de la antigüedad nos siguen sorprendiendo hasta hoy. Estructuras como las Pirámides, la Gran Muralla China, las Ruinas Mayas y otros maravillas muestran avances tecnológicos que aún llenan de interrogantes a los investigadores.
Pero quizás los avances más sorprendentes fueron en lo relativo a la salud y la medicina, que siguen siendo un universo lleno de interrogantes que comienzan a responderse a gotas en la actualidad.
Investigadores del Instituto de Arqueología y Etnografía (dependiente de la Academia de las Ciencias de Rusia) que tras meses de trabajo, lograron responder algunas de las interrogantes de los cirujanos de la antigüedad, en una de las disciplinas más complejas hasta el día de hoy.
Los investigadores quedaron sorprendidos de cómo los especialistas de la antigüedad lograron realizar trepanaciones utilizando herramientas primitivas, como cuchillos de cobre y raspadores con una precisión increíble, hace 2300 años, según señala ABC.
El grupo responsable de la investigación formado principalmente por neurocirujanos, antropólogos y arqueólogos, decidió comenzar los estudios hace un año, luego que se descubrieran las montañas de Altai, en Siberia, tres cráneos con más de dos milenios de antigüedad en los que se podían apreciar agujeros de trepanación.
Se trata de una técnica ocupada en la antigüedad, donde se realizaba un agujero en el cráneo, con el fin de sanar distintas enfermedades y lesiones.
Según los expertos, los tres cráneos encontrados presentan está técnica. En el primer caso habrían logrado aliviar un hematoma. En el segundo, el paciente tenía una malformación congénita que se intentó solucionar a través de esta operación.
Los investigadores afirman estar sorprendidos por el grado de precisión de las intervenciones, donde se puede apreciar una gran dedicación para reducir los riesgos en los pacientes. Algo que es sumamente difícil con las herramientas de ese tiempo, las mismas que intentaron recrear durante el estudio.