Trump sin escrúpulos sobre la tortura: "Me gusta mucho y no me parece tan duro"
El candidato republicano explicó qué le parecía la técnica del ahogamiento simulado, método prohibido en Estados Unidos desde 2006 por su ilegalidad y dudosa eficacia.
Durante su gira en Ohio, Donald Trump se refirió a la aplicación de técnicas de tortura por parte de fuerzas policiales a terroristas para obtener información, específicamente sobre el waterboarding o ahogamiento simulado.
Al respecto, Trump, sin ningún escrúpulo, dijo: “Me preguntaron qué pensaba del waterboarding y dije que me gusta mucho, que no me parece tan duro“. Es más, el candidato republicano indicó que la restricción de ese método hace quedar al país como “débil”, “estúpido” y “sin liderazgo”.
Finalmente, el discurso de Trump terminó con una frase e ideología que está lejos de ubicarse en la esfera del diálogo y promoción de la paz: “El fuego debe combatirse con fuego”, dijo ante sus adherentes.
En 2006, la técnica del ahogamiento simulado fue prohibido por en el ejército de Estados Unidos por su ilegalidad y dudosa eficacia. Luego, en 2009 con Barack Obama al mando se cerró el programa de interrogación de la CIA.
