Justicia argentina condena a cadena perpetua por crímenes de lesa humanidad al último dictador del país
El ex militar y dictador entre 1982 y 1983 de Argentina fue responsable de la Operación Cóndor en el país.
Tras el fallecimiento de Videla, solo quedaba un último dictador argentino vivo: Reynaldo Bignone. El dictador que condujo el país trasandino entre 1982 y 1983, había sido anteriormente condenado por su responsabilidad en un proceso de secuestros, torturas y asesinatos mientras fue Comandante en Jefe.
Ya había sido condenado siete veces en 2016 por delitos de lesa humanidad: a 25 años de prisión en 2010; a reclusión perpetua en 2011; a 15 años en 2011; a 15 años en 2012; a reclusión perpetua en 2013; a 23 años en 2014. Parte de su legado fue el secuestro sistemático de menores y el liderazgo del plan de exterminio “Operación Cóndor”.
En esta oportunidad fue condenado por hechos ocurridos entre 1976 y 1977 en el Colegio Militar de la Nación, donde se secuestró e hizo desaparecer a jóvenes que en ese entonces hacían el servicio militar obligatorio.
El ex dictador deberá permanecer en prisión hasta el fin de sus deseos y a la espera de que obtenga nuevas condenas en vida por sus crímenes contra los DD. HH.