Seis hombres la violaron mientras clamaba por su bebé: la historia de Recy Taylor, la mujer que inspiró el discurso de Oprah Winfrey
Su historia se remonta a 1944, año en que fue secuestrada y violada por seis hombres blancos cuando salía de la iglesia y se dirigía a su casa.
El potente discurso de Oprah Winfrey en los Globos de Oro contra el abuso y acoso hacia las mujeres el domingo pasado remeció al público. Cargado de fuerza, la famosa animadora estadounidense comenzó haciendo un homenaje a Recy Taylor, una de las primeras en denunciar la violencia de género.
Su historia se remonta a 1944, año en que fue secuestrada y violada por seis hombres blancos cuando salía de la iglesia y se dirigía a su casa, Alabama, Estados Unidos.
Casi de inmediato, la policía identificó el auto y a su conductor; Hugo Wilson, quien dio la identidad de los otros seis hombres que violaron a Taylor. Sin embargo, la investigación se saldó con una multa de 250 dólares para Wilson. Poco después se realizó un juicio, compuesto sólo por hombres blancos. El veredicto fue que no habían pruebas suficientes que acreditaran el delito y los agresores nunca fueron condenados.
Pese a eso, el caso cobró visibilidad. Incluso se grabó un documental titulado “La violación de Recy Taylor”, dirigido por Nancy Buirski, donde la propia víctima da su testimonio. “No nos miraban como seres humanos, sino como animales. Y algunos aun lo creen”, explica en el documental uno de los nietos de Taylor.
La obra audiovisual mezcla imágenes de archivo, entrevistas a los protagonistas del caso, y expone tanto la violencia de género como el racismo y el drama familiar. Otros cuatro implicados, como se escucha en el filme, confirmaron haber tenido sexo con Taylor la noche del 3 de septiembre de 1944, pero aseguraron que se trata de “solo una prostituta” y que se mostró de acuerdo con ellos.
Recién en 2011 el Estado de Alabama le pidió disculpas por “fracasar en perseguir a sus agresores”. Recy Taylor murió a los 97 años, apenas diez días antes del discurso en que Oprah Winfrey la homenajeó frente a una industria hollywoodense marcada por la violencia de género hace décadas.