Caso Narumi: inician en Francia juicio contra chileno Nicolás Zepeda
El hombre es el principal sospechoso de la desaparición de su ex novia japonesa Narumi Kurosaki, ocurrida en diciembre de 2016, en la localidad de Besanzón.
Zepeda fue extraditado a Francia durante el año 2020. AGENCIA UNO/ARCHIVO
Este lunes comenzó en Francia el juicio en contra del ciudadano chileno Nicolás Zepeda, quien es el único sospechoso de la desaparición de su ex novia, la japonesa Narumi Kurosaki, cuyo rastro se perdió en diciembre de 2016, en la localidad de Besanzón.
El procesos contará con traducciones simultáneas al español y al japonés y testigos interrogados por videoconferencia desde Japón o Chile, según lo consignado por T13. Las audiencias se extenderían hasta el próximo 12 de abril.
El hombre, quien tiene 31 años, siempre ha negado tener cualquier vínculo con la desaparición de Kurosaki, que aún no ha sido encontrada tras cinco años de intensa búsqueda por parte de la justicia francesa.
Zepeda y Kurosaki se conocieron en 2014. Los jóvenes iniciaron una relación sentimental en 2015 y al año siguiente comenzaron a distanciarse, lo que llevó al fin de la relación.
En 2016, Zepeda se reencontró con Narumi en Francia y reconoció haber pasado con ella parte de la madrugada del 5 de diciembre de 2016 en el campus donde ella se hospedaba. Sin embargo, declaró que la joven se encontraba en perfecto estado de salud cuando abandonó la habitación.
En contraparte, estudiantes del campus escucharon “alaridos de terror, gritos” provenientes de dicha pieza, pero nadie denunció los hechos.
Según la acusación, el hombre no soportó la ruptura y mató a su ex pareja en su cuarto de la universidad, antes de deshacerse del cuerpo en los vastos bosques del Jura.
La investigación francesa constató que esa noche Nicolás Zepeda se trasladó, de acuerdo a la geolocalización del automóvil que arrendó, hasta una zona boscosa donde los investigadores presumen que se deshizo del cuerpo. De hecho, días antes también compró 5 litros de un producto inflamable y fósforos, pero nunca se pudo hallar el cadáver.
Posteriormente, Zepeda regresó a Chile antes que la policía francesa recibiera la alerta de la desaparición de la joven.
En mayo de 2020 la Corte Suprema aprobó la extradición del chileno a Francia, emprendiendo vuelo a Europa en julio de ese mismo año, quedando así a disposición de la justicia francesa.
