Colombia: Fuerzas Militares explican por qué no aparece el perro Wilson
En la búsqueda participan más de 100 uniformados e indígenas, además de dejar comida en diversos sectores para que Wilson sepa que está siendo buscado.
Las Fuerzas Militares aseguraron que Wilson, como ya encontró a los niños, quiere informárselo a su guía canino, por eso emprendió el camino de vuelta. FUERZAS MILITARES COLOMBIA
La Operación Esperanza, desplegada por las Fuerzas Militares de Colombia para encontrar a los cuatro niños desaparecidos en la selva por 40 días, permanece activa, esta vez para encontrar al perro Wilson, el primero en hallar a Lesly (13 años), Soleiny (9), Tien Noriel (5) y Cristin (1).
Según Lesly, Wilson los acompañó por varios días, indicando que ya estaba flaco y “siempre era como si estuviera buscando a alguien”. Incluso los niños realizaron dos dibujos en honor al can.
El perro lleva dos semana perdido en la selva entre Guavire y Caquetá, ante la complejidad del terreno y las adversas condiciones climáticas.
Las Fuerzas Militares aseguraron que Wilson, como ya encontró a los niños, quiere informárselo a su guía canino, por eso emprendió el camino de vuelta.
Cristian David Lara Cuaran, su guía, permanece en la selva buscando a su compañero por cinco años, lo explicó el organismo, que indicó que “no ha querido salir del área hasta encontrar a su perrito, esos binomios generan un lazo de toda la vida. Es un lazo impresionante donde la lealtad es fundamental”.
La última vez que Wilson fue visto por las unidades militares fue el pasado 8 de junio, quienes lo vieron desorientado.
“Nosotros el día 8 (de junio), un día antes de salir de la selva, alcanzamos a ver al canino a 30, 40 metros y el perro se nos apareció y alcanzamos a ver a Wilson. El compañero mío intentó como jugarle, cómo activarlo, cómo llamarlo para ver si venía hacia nosotros, para cogerlo, pero el perro se asustó y salió y se perdió otra vez en la selva”, declaró Carlos Villegas, miembro de la Defensa Civil, a Blu Radio.
En la búsqueda participan más de 100 uniformados e indígenas, además de dejar comida en diversos sectores para que Wilson sepa que está siendo buscado.
