Ominami y relación de SQM con Chile 21: "Somos una institución diversa, no habría ninguna condición para decir 'esta plata se la pasamos a Marco'"
Los antecedentes de la arista SQM siguen revelando vínculos de la empresa con diversos actores. Esta vez: la Fundación de centroizquierda Chile 21, quien recibió $90 millones entre 2012 y 2013 por parte de la empresa minera. ¿El servicio? Informes de actualidad "con valor agregado", según explica su presidente ejecutivo, quien reconoce que, a ojos de la ciudadanía, dicho trabajo se puede "prestar para malas interpretaciones". Con todo, aclara: "Nuestras opiniones institucionales nunca han estado influidas por los suscriptores que tenemos".
Al igual que un diario, Chile 21 tiene suscriptores para financiarse. Y SQM, la empresa minera de Julio Ponce Lerou -ex yerno de Augusto Pinochet-, es uno de ellos. La misma empresa que hoy está siendo investigada por la Fiscalía y el Servicio de Impuestos Internos por posible delito tributario y desvío de platas para financiar campañas políticas y que, de paso, dio pie a la furia ciudadana, dejando en vilo a toda la clase política.
Y si bien para algunos podría ser una contradicción que una institución ligada a la izquierda pida plata a la empresa que el ex yerno de Augusto Pinochet comenzó a controlar luego del proceso de privatización de empresas estatales, Ominami afirma que hay que hacer “un juicio objetivo y no uno moral. En ese sentido, no tengo que cerrar los ojos en esto”, en alusión a las palabras del ex director de Chile 21 Francisco Vidal. De los informes que hacen a SQM, de la falta de regulación de las fundaciones y de si se ocupó parte de ese dinero para la candidatura presidencia de su hijo, Marco Enríquez-Ominami, habla en entrevista con El Dínamo.
-Francisco Vidal dijo que, a veces, había que “cerrar los ojos” al momento de pedir financiamiento a empresas. A usted, que es uno de los que fue opositor a la dictadura, ¿le hace ruido pedir plata al ex yerno de Pinochet?
-Nosotros lo explicamos en el comunicado: tenemos un sistema de suscripción y a esta suscripción puede acceder cualquier empresa. Hay gente que también se ofrece a suscribirse. En ese sentido, es como una suscripción a un diario. Ahora, convengamos lo siguiente: Soquimich tiene el origen que tiene, pero es una empresa legalmente constituida y que es considerada una gran empresa por parte de los organismos fiscalizadores de Chile y de Estados Unidos. Nosotros funcionamos sobre la base de esos criterios. Tenemos que hacer un juicio objetivo y no uno moral. En ese sentido, no tengo que cerrar los ojos en esto. No somos delincuentes, pero tampoco somos fiscales porque es una empresa que tiene un buen estatus legal, que es considerada como tal por todas las instancias habilitadas para hacer un juicio sobre la legalidad de esta.
-¿Qué servicio en específico se le prestaba a SQM a cambio de dinero para financiar la Fundación?
-Lo que hicimos fue entregar nuestros informes mensuales, que son muy completos. Son informes de actualidad con mucho valor agregado, mucho conocimiento de lo que está ocurriendo. También los invitamos a nuestras actividades y entregamos las conclusiones en los talleres. Estamos disponibles a entregar nuestros puntos de vista sobre los distintos temas que se nos pregunten. No hacemos lobby, ni tráfico de influencias, ni gestión para los intereses de privados.
-¿Sobre qué se tratan esos informes de actualidad?
-Se trata de actualidad política, económica, de políticas sociales. Hacemos lo que muy poca gente puede hacer: informes sobre coyuntura de Bolivia, Argentina, de Brasil, de Perú, porque tenemos las conexiones. Nuestros informes no son una copia, tienen mucho valor agregado porque tiene la experiencia en el funcionamiento de las políticas públicas y en temas internacionales, que son muy valorados. Eso es parte de nuestra ventaja comparativa.
-Dado el escenario que rodea a dicha empresa, ¿seguirán pidiéndole apoyo económico?
-No sé, esa es una decisión que tienen que tomar ellos. Nosotros sentimos que hemos honrado nuestro contrato, tenemos la conciencia tranquila. Ahora, evidentemente SQM está pasando por un momento crítico.
-¿Considera que ese tipo de hechos contribuye a que la gente ya no confíe en la política y que crea que la derecha y la izquierda son lo mismo?
-Estoy de acuerdo porque esto se presta para malas interpretaciones. Ahora, yo quiero ser enfático en que nunca nuestras opiniones institucionales han estado influidas por los suscriptores que tenemos. Ellos saben estrictamente que nuestras opiniones están determinadas por nuestras convicciones y no por las suscripciones que tenemos. No voy a decir las empresas, pero incluso hemos perdido a tres suscriptores importantes por nuestras opiniones.
-En Chile no está regulado el financiamiento a las fundaciones…
-Nosotros intentamos, hace unos años, pedir apoyo a la Fundación (Friedrich) Ebert, fuimos juntos con Libertad y Desarrollo y con Cristián Larroulet en su minuto, a Alemania a revisar la ley de las fundaciones. Allá tienen estrictamente prohibido recibir dinero de privados y a nosotros nos parece bien eso. Acá no está regulado, tenemos cero financiamiento público. Por eso reitero que este no es el mejor sistema. A mí me han dicho que nosotros que tenemos que desclasificar todas las cosas, pero yo las desclasifico en la medida en que las otras fundaciones también lo hagan.
-Francisco Vidal negó que con los $90 millones que recibieron de SQM se haya financiado, en parte, la campaña presidencial de Marco Enríquez-Ominami en 2o13. ¿Qué responde usted al respecto?
-Esta institución no es marquista, es una institución amplia, aquí la mayoría de la gente de la fundación estuvo con Bachelet. En 2009 había gente que estaba con Frei, otros con Marco, otros con Arrate, entonces no es una institución que gire entorno a una persona, eso fue antiguamente con Ricardo Lagos. Ahora somos una institución diversa políticamente, no habría ninguna condición para decir ‘esta plata se la pasamos a Marco’. Segundo, nosotros gastamos los recursos que recibimos y eso está perfectamente transparentado. Por lo tanto ese es un argumento totalmente poco informado. Yo tengo mis opiniones, pero aquí no me mando solo y tampoco haría algo totalmente impropio que pondría en riesgo a la fundación. Sería completamente idiota.
-Considerando los actuales casos de delito tributario para financiar campañas políticas, el pago de SQM a Chile 21, ¿puede afectar, en cierto modo, la candidatura presidencial de ME-O, dado que usted es su padre?
-Yo creo que no, pero no puedo evitar que haya gente que busque malévolamente hacer la conexión. Esa conexión no existe. Y tan es así que gente del mundo de Marco muchas veces nos ven con cierta sospecha porque nos ven que somos más parte de la Nueva Mayoría que del movimiento progresista. Como digo, aquí no hay ninguna condición política.