Hermano de Fernando Karadima: “Le dije al Papa que quería denunciar a Barros, a Koljatic, Arteaga y Valenzuela”
Al ser consultado sobre si Fernando Karadima quería a su familia, respondió que "Fernando solo se quiere a sí mismo".
En una extensa entrevista, el hermano del sacerdote acusado de abuso sexual, Fernando Karadima, habló por primera vez con la prensa y se refirió a la personalidad del ex párroco de El Bosque, su relación con él y las acusaciones que ha recibido.
Al respecto, Óscar Karadima explicó a La Tercera que fue uno de los dos laicos invitados por El Papa para hablar sobre las víctimas de acoso sexual en El Vaticano.
“Ni Ezzati, ni Errázuriz, ni nadie reconoció nuestro dolor. Por eso, lo que también yo pido, porque nunca nadie lo ha dicho, es justicia con mi familia. El Papa fue el único que tuvo palabras de cariño y de consuelo hacia ellos. Me pidió que les transmitiera a mis hermanos, a mis hijos y a mis nietos el lamento suyo y que pedía perdón por lo que habíamos sufrido”, comentó.
“Antes de que ocurriera toda esta tragedia yo pasaba mi carné de identidad tranquilo”, confesó y agregó que “toda la familia Karadima ha sido víctima de abuso de poder y de conciencia. Fernando era un hombre soberbio, un hombre autoritario, un hombre a quien le teníamos temor”.
“Nos despreciaba, no nos quería. Él tenía una actitud altanera. Él se creía superior a todos. No nos respetaba, no nos tomaba en cuenta. No nos dio nunca su número de celular. Teníamos que llamar a la parroquia y ahí él nos llamaba de vuelta. Para verlo había que pedirle audiencia”, afirmó.
Al ser consultado sobre si Fernando Karadima quería a su familia, respondió que “Fernando solo se quiere a sí mismo”.
“Un sacerdote tiene que ser humano con su familia. Tiene que regalar su tiempo, no regalar su dinero. Él regalaba dinero, que no sé de dónde lo sacaba”, añadió.
“Mató el apellido, mató nuestra sangre. Fernando nos mató como familia con esto”.
Sobre la culpabilidad de su hermano, Oscar no tiene duda alguna. “Sí, es culpable. Ahora creo. Me costó muchísimo creer, siempre tuve lo que se llama la duda razonable. En el fondo, no quería creer. Era mi hermano, es mi hermano. Creer una cosa así de tu propio hermano es terrible”, confesó.
En su reunión con el Papa, Oscar habló de los cercanos a su hermano y los denunció: “Le dije (Al Papa) que quería denunciar a Barros, a Koljatic, Arteaga y Valenzuela, a quienes conozco desde muy jóvenes, y que fueron testigos y encubrieron los abusos. El Papa me detuvo y me dijo: ‘Hábleme de Barros’. Y yo le dije: ‘Su Santidad, el obispo Barros ha mentido. Él era amigo de mi hermano y, en cierto modo, podría decir que pertenecía a su círculo de hierro’”, detalló.