Ugarte responde a Mañalich por uso de plasma: “Estamos intentando demostrar el posible beneficio de esta terapia”
El director de la Unidad de Cuidados Intensivos de la Clínica Indisa fue el primer médico en utilizar este tipo de tratamiento en pacientes críticos con COVID-19.
Este domingo, el ministro de Salud, Jaime Mañalich, se refirió al tratamiento con plasma de personas recuperadas de COVID-19 que se ha estado implementando en aquellas personas que se encuentran en estado crítico. El médico Sebastián Ugarte fue uno de los primeros en implementar esta medida en la Clínica Indisa, por lo que también tuvo palabras para referirse a lo señalado por el secretario de Estado.
Durante el punto de prensa, Mañalich sostuvo que “no hay autorización ni evidencia cierta de que sea una terapia que contribuya al manejo de los pacientes más graves”, agregando que “lo que es cierto es que es un tratamiento extraordinariamiente riesgoso porque estamos usando plasma de una persona que ha tenido una infección por Covid-19 y que puede tener otras enfermedades”.
“El uso de plasma para tratar pacientes graves de coronavirus está en un trámite experimental (…) Esperamos que esta experiencia con plasma no se sume a la larga historia de fracasos en el tratamiento con coronavirus”, añadió, para cerrar el tema indicando que “tiene que haber un control ético y consentimiento informado para que las personas participen voluntariamente de este tipo de tratamiento”.
Sobre esto, Ugarte aseguró que “lo que dice el ministro no es incorrecto. Él dice, por lo menos lo que alcancé a escuchar, que no está demostrada, fuera de dudas, la eficacia de estos tratamientos y eso es cierto en el sentido en que, en ciencia, en medicina, para poder mostrar la eficacia de un tratamiento se requiere hacer estudios que cumplan con una serie de requisitos y esos están todavía en marcha”.
“En Chile estamos varios investigadores en intentar demostrar el posible beneficio de esta terapia, que parece que es beneficioso. Pero una cosa es que parezca y otra es que se pueda demostrarlo científicamente fuera de toda duda”, explicó.
Aún así, aclaró que “el ministro también planteó de que incluso podría tener ciertos peligros, básicamente los mismos de cualquier transfusión. Todos los días en los hospitales de Chile los pacientes reciben transfusión y para evitar que tengan problemas se toman precauciones. Hoy en día, eso se evita en los bancos de sangre, tomando una serie de exámenes para descartar que el portador no tenga una infección”.
Sobre el tratamiento con plasma hiperinmune, Ugarte insistió en que se siguen realizando investigaciones en el país para demostrar que su uso es beneficioso, y pese a que así se ha demostrado a través de diversos casos, “hay que juntar un número suficientemente grande de pacientes para demostrar que esto es producto del plasma y no fue solo por la suerte o una casualidad”.
“Los resultados los vamos a tener cuando hayamos terminado el peak de la epidemia en el país, quizás en un año o en seis meses más exista una publicación científica que demuestre esta posibilidad. Hoy en día tenemos muchos hospitalizados graves y en estos momentos se les puede dar el tratamiento en el marco de un protocolo de investigación con el consentimiento del paciente o su familia y con una investigación aprobada por un comité de ética”, cerró Ugarte, asegurando que si a él le consultaran si lo utilizaría en algún familiar, sus respuesta sería afirmativa.