Subsecretaria de DD.HH. desata la polémica con su postura sobre las terapias de conversión para “curar la homosexualidad”
Lorena Recabarren rechazó una indicación que busca prohibir este tipo de tratamientos. Tanto ella como el ministro de Justicia, Hernán Larraín, tuvieron que salir a aclarar su opinión ante las críticas.
La subsecretaria de Derechos Humanos, Lorena Recabarren, desató una gran polémica luego de manifestar su postura ante una indicación presentada por la presidenta del Senado, Adriana Muñoz (PPD), la que busca prohibir las terapias de conversión, las que buscan “curar la homosexualidad” con cuestionados métodos.
Todo comenzó con una presentación de la autoridad ante la comisión de Derechos Humanos, en donde planteó sus diferencias con la redacción de la iniciativa.
“El Estado de Chile siempre ha señalado que se opone a las terapias de conversión. Pero la forma que está redactada (la indicación) está en términos absolutos, es decir se podría aplicar a casos donde se podría contar con la anuencia de una persona que quisiera tratarse”, expresó Recabarren.
Tras esto, la subsecretaria afirmó que “ahí estamos en un problema, porque iríamos contra la voluntad de una persona”, puntualizando que “teniendo presente la prohibición de las terapias de conversión, teniendo clarísimo esto, podría ocurrir que una persona que si quisiera y tuviera la voluntad de hacerlo, estaríamos diciendo que este tipo de actos es discriminatorio”.
Las palabras de la representante de Gobierno fueron rechazadas por el Movimiento de Integración y Liberación Homosexual (Movilh), quien afirmó que con aquella visión Lorena Recabarren estaba defendiendo la realización de los criticados tratamientos.
Ante la ola de cuestionamientos, la subsecretaria tuvo que salir a aclarar sus dichos y a través de su cuenta de Twitter aseguró que era totalmente contraria a este tipo de terapias, las que calificó como “denigrantes”.
“En tramitación del proyecto sugerí mejorar redacción de una indicación determinada, hubo acuerdo de la comisión en elaborar nueva propuesta, y quedó pendiente de votación. Nunca he dicho que las terapias de conversión puedan ser voluntarias”, aseguró.
La subsecretaria recibió el respaldo del ministro de Justicia, Hernán Larraín, quien afirmó que la autoridad fue “malinterpretada” en sus declaraciones durante la comisión.
“Ella es enemiga de los tratamientos o terapias de conversión. Ella planteó que había que eliminarlos de la ley. Ella no es partidaria, es contraria a las terapias de conversión. Yo no sé dónde se produjo la mala interpretación”, expresó el secretario de Estado a Tele13 Radio.
La Organización de Naciones Unidas (ONU) ha expresado su repudio total a este tipo de tratamientos, asegurando que son “carentes de ética” e “ineficaces” para abordar la orientación sexual de las personas.