Fiscalía apunta a Mañalich por manejo improvisado e incompleto de datos COVID
Para el Ministerio Público esta situación era "evitable", ya que contaban con información fidedigna por parte del DIPLAS y el sistema Epivigila.
La Fiscalía Centro Norte, a través de Xavier Armendáriz, ingresó una petición a la Corte Suprema para el Ministerio de Salud entregue los antecedentes vinculados por las muertes COVID, aduciendo que existen indicios de un manejo improvisado e incompleto de los datos durante la gestión de Jaime Mañalich.
En el escrito, dado a conocer por T13, señala que Mañalich y su otrora jefa de gabinete Itziar Linazasoro crearon un sistema de recolección de datos que “no era improvisado y distinto del diseñado bajo parámetros técnicos, por el Departamento de Epidemiología del Minsal, sino que, además, manejaba información incompleta”.
En la misma línea, se plantea que las cuarentenas dinámicas implementadas en su momento se concretaron con esta información incompleta, pasando por alto “variables relevantes como la tasa de reproducción o el real número de casos activos que existían en una determinada localidad”.
Para el Ministerio Público esta situación era “evitable”, ya que contaban con información fidedigna por parte del DIPLAS y el sistema Epivigila.
Además, el fiscal Armendáriz hizo hincapié que Jaime Mañalich fue advertido de la carencia de sustento técnico en sus decisiones por parte la comunidad científica y por Johanna Acevedo, jefa de la División de Planificación Sanitaria del Minsal y otrora jefa del Departamento de Epidemiología de la cartera, y quien tuvo entre sus tareas la implementación de la plataforma Epivigila.
En su declaración ante la Fiscalía, Acevedo dejó en claro que alertó a Mañalich sobre el manejo erróneo de los datos, señalando que ya en marzo Epivigila diferenciaba ente casos sospechosos y confirmados, junto con enviar informes desagregados por comuna, población mayor de 60 años e incluso por sistema de salud, lo cual no fue considerado.
Es por esto que para el Ministerio Público, el ex titular del Minsal desoyó las recomendaciones de la OMS y del Comité Asesor, por lo que su actuación “pudo haber influido gravemente en la toma de decisiones relativas a acciones destinadas a salvaguardar la salud de la población y la vida de los ciudadanos chilenos”.
Para ejemplificar su argumento, el fiscal da cuenta de la aplicación de las cuarentenas en la Región Metropolitana, la que pasó “en pocos días, de estar en una meseta que anticipaba una ‘nueva normalidad’ a transformarse en el lugar donde se desarrollaría la denominada ‘batalla por Santiago'”.
En definitiva, esto “pudo haber influido decisivamente en el aumento de la propagación de una enfermedad grave como lo es el Covid-19 entre los habitantes de la República y, consecuencialmente, haber resultado en un aumento de muertes”, las cuales “no se habrían producido si se hubiera optado por decretar medidas de reducción de movilidad y aislamiento social, más tempranamente, de acuerdo con los datos reales (y no los públicos) que obraban en manos del Ministro de Salud y sus asesores”.