La letra chica
En conclusión: Este gobierno ha defraudado en las reformas, como la tributaria que si la está pagando la clase media, educacional que aún no está e incluyendo en la agenda otras que inyectan inestabilidad -laboral y constitucional- y cuyos efectos están siendo detenidos con un avance del gasto, es decir, deuda. Estamos gastando más de lo recaudamos y peor, la pregunta es en qué lo estamos gastando … ¿los sueldos de quién? y ¿para qué?
La inflación de noviembre fue de 0,0%, un alivio para los deudores en UFs. El desempleo bajó a 6,4%. El crecimiento económico estuvo en la cota superior de las expectativas de mercado con una variación de 1,5% para el IMACEC. Todas cifras celebradas que anunciarían el fin de un proceso nefasto de desaceleración económica, pero no, la verdad es que sólo reafirman lo mal que estamos.
El crecimiento económico logró estar en la parte superior de las expectativas de mercado, que esperaban entre un 1,0% a 1,5% de variación para el IMACEC. Se logró un 1,5% que ha dejado a más de alguno con una sonrisa, no obstante, la cifra es mala, reafirma que la economía crecerá este año a un 1,8% bajando, nuevamente, las expectativas de crecimiento que en enero eran de un 4,5% y ya vamos en un 2,0% y dado este indicador es de esperar que se modifique, nuevamente, las exceptivas de crecimiento hacia un 1,8% o inferior. La cifra del IMACEC se debe a que el “mercado” ya no cree que seamos capaces de nada, por ende, entre nada y algo, habrá que celebrar ese algo.
Sin crecimiento, no hay empleo, pero “wait!”, lo hay -wiiii- El desempleo bajó desde 6,6% hacia 6,4%. Una buena noticia, pero sospechosa, es decir, si no hay crecimiento económico por qué hay empleo y la explicación viene dada por la generación, directa o indirecta del Estado en la creación de ellos, es decir, empleos que se pagan con nuestros impuestos, los cuales, reforma tributaria mediante, no alcanzan para los gastos del gobierno explicando el crédito por dos mil millones de dólares que tomó el Ministro Arenas, a nombre de todos nosotros (y eso que la reforma educacional aún no está).
La inflación, parece una buena noticia, es decir, con el acumulado del año, el avance de la UF, una cifra negativa o nula, como fue en este caso, es bienvenida, pero la inflación real sigue aumentando. La inflación fue nula debido a la baja internacional del petróleo y otras materias primas como el gas, y de no existir MEPCO habría sido aún mejor. El precio del petróleo ha bajado más de un 30% y las gasolinas cerca de un 12%. Los precios locales aumentaron un 0,3% y los precios internacionales más la baja de las frutas y verduras frescas llevaron a que el indicador global fuera de 0,0%, algo así como salvados por el escenario internacional y en ningún caso por nuestras gestiones macroeconómicas.
En conclusión: Este gobierno ha defraudado en las reformas, como la tributaria que si la está pagando la clase media, educacional que aún no está e incluyendo en la agenda otras que inyectan inestabilidad -laboral y constitucional- y cuyos efectos están siendo detenidos con un avance del gasto, es decir, deuda. Estamos gastando más de lo recaudamos y peor, la pregunta es en qué lo estamos gastando … ¿los sueldos de quién? y ¿para qué?