La innovación tecnológica y el futuro en la operaciones de la minería
La demanda sin precedentes de materias primas a nivel mundial le ha impuesto a la minería chilena la necesidad de revisar, potenciar y mejorar los métodos de explotación existentes, incluyendo los diseños mineros, tecnologías de transporte, procesamiento de materiales, automatización y otros, tanto en la minería de cielo abierto como subterránea.
Andrés Aguirre Valenzuela es Presidente de Aprimin y Experto Avonni. Ingeniero civil mecánico de la Universidad Santa Maria, con 30 años de experiencia en el mundo minero. Ha trabajado en Codelco El Salvador, Disputada de Las Condes y Phelps Dodge Mining Company, tanto en Chile como en su casa matriz de Phoenix, Arizona. Komatsu Chile y Komatsu Latinoamérica. Actualmente es Presidente de Aprimin y Vicepresidente de Komatsu, ocupando varios directorios de la empresa en Chile y la región.
La industria presenta hoy múltiples desafíos de coyuntura, y necesita de nuevos diseños y soluciones que no sólo optimicen la operación, sino que incluyan la creación de valor como parte central de la propuesta. Desarrollos tecnológicos que deben ser estructurales para que la industria se mantenga competitiva en el largo plazo.
Actualmente existen macro tendencias que van en esa dirección, y una nueva generación minera que se instala en el sector a través de la Innovación Tecnológica Aplicada. Hoy es un hecho que la minería migrará hacia operaciones inteligentes que, usando tecnología de punta, permitirán operar en forma ubicua y a distancia, con información en línea y plataformas integradas desde la “mina a puerto”.
En este nuevo escenario, los actores que participen en el entorno de la minería se mantendrán vigentes en la medida que sus modelos de negocios integren la innovación como un valor central de su propuesta, no solo pensando en ofrecer innovación tecnológica y procesos/operaciones inteligentes, sino también orientando sus esfuerzos hacia el ofrecimiento de productos de calidad, un servicio integral, calidad en las relaciones de largo plazo y una experiencia de alto nivel.
Hoy en día vemos que las necesidades a solucionar se enfocarán sin duda la seguridad, aumentos en productividad, reducción de costos y la continuidad operacional. Y en este sentido, los quiebres tecnológicos de los que hablamos deberán tener impacto en términos de productividad de dos a tres veces sobre los datos existentes.
Si bien hoy la minería subterránea del cobre representa un 15% de la producción mundial, para el año 2030 este porcentaje se incrementará a valores cercanos al 40%, siendo los procesos de Block y Panel Caving los más relevantes. En consecuencia, la minería subterránea necesita de importantes desarrollos tecnológicos que le permitan operar a gran escala y con costos bajos.
Algunos de los desarrollos necesarios en este ámbito son el control del hundimiento y la fragmentación, incrementos en las velocidades de extracción, rediseño de las configuraciones de extracción y footprints, reemplazo de los métodos de perforación y tronadura, y cambios en los sistemas de manejos de materiales. Las tecnologías de información, comunicación, automatización y robótica también tendrán impactos relevantes en la operación de la minería.
Si como industria conseguimos instalar la urgencia de que todos sus actores integren la innovación tecnológica en la cadena de valor de la industria, como una variable esencial y mandatoria para aportar eficiencia y sustentabilidad a los procesos, la minería no sólo superará con éxito el desafío de mantenerse vigente y competitiva a nivel mundial, sino que seremos capaces de liderar el cambio a nivel mundial, e instalarnos como un ejemplo de creación de valor global.
Por Andrés Aguirre
Presidente APRIMIN y Experto Avonni Minería
Por Julio Morales
Presidente Comité Innovación Aprimin
