La verdad tras el anuncio del gobierno de prohibir circos con animales en Chile
"Es necesario no quedarnos conformes con el último mensaje del Ministro Ottone. Mientras en muchos países del mundo han terminado con los circos con animales o van en vías de prohibirlos, el gobierno de Chile tan sólo quiso dar regulaciones y las legitima mediante un reglamento a través del Concejo de la Cultura".
Ximena Wiesenfeld es Directiva AnimaNaturalis Internacional-Chilechile@animanaturalis.org
Primero fue el polémico anuncio de la normativa anunciada por la presidenta Bachelet en conjunto con el Ministerio de Cultura, el cual hablaba de reglamentar y fiscalizar el estado en que se encuentran los animales que actualmente “trabajan” en varios circos a lo largo de Chile.
De inmediato se levantó la voz de alarma de diversas agrupaciones animalistas chilenas y defensores de los animales. Muchos pensaron de inmediato que “habían vuelto los circos con animales”, cuando la realidad es que en nuestro país nunca han estado prohibidos. Jamás ha habido una ley que de modo expreso prohíba el uso de todo tipo de animales en este tipo de espectáculos.
La sorpresa fue que, para quienes creían que Chile iba en vías de terminar con lo que se cree es un tipo de explotación animal, vieron en esta medida no precisamente una ayuda para estos animales, si no tan sólo una política bienestarista que iría contra cualquier pretensión de avanzar hacia la abolición de los circos con animales en nuestro país.
Es así como, a los dos días de haberse manifestado ésta medida, el Ministro de Cultura Ernesto Ottone, anunció públicamente que esto cambiará con el Ministerio de las Culturas, el cual eliminaría la presencia de animales en circos. De inmediato esto se viralizó a través de las redes sociales y con esto se logró de cierta manera aquietar aguas y calmar a los opositores a la polémica reglamentación. Pero para muchos este mensaje no sólo es incierto sino también ambiguo.
Esto cambiará con #MinisterioDeLasCulturas que elimina presencia de animales en circos. Desde su origen, proyecto recoge opinión ciudadana.
— Ernesto Ottone R. (@ErnestoOttoneR) 5 de mayo de 2016
Gonzalo Fernandez Aravena, Encargado de Comunicaciones de la Sociedad Protectora de Animales de Valparaíso, cuestiona este informe, recalcando que lo que realmente falta es una ley que indique de forma clara el término de los circos con animales y no sólo prohibir de forma nominal, lo cual es importante por supuesto, pero además se debe generar una institucionalidad acorde a velar y cumplir esta legislación.
Eso sumado a la necesidad de preocuparse por la existencia de centros de rescates o santuarios de animales silvestres para que puedan recibir a los animales que serían decomisados y además la institucionalidad se preocupe también por los animales exóticos que entran por tráfico. Es decir, una solución que debiera ser integral.
Por otro lado, la periodista y activista pro animal Paola Dragnic, dice que en la Ley 20216, en la cual se establece que el circo pertenece al patrimonio cultural de Chile, menciona en su artículo 2 el uso de animales amaestrados, lo cual deja todo abierto y al final es sólo un reglamento asociado a la ley de circos. Al final este proyecto de ley que se está anunciando se trataría de un triste aporte que sólo viene a desorganizar aún más el marco jurídico contradictorio bajo el cual los animales son considerados en Chile.
Al final lo que se necesita es una ley global para todos los animales, que abarque todo junto y no por sectores. Lo que manifiesta Ottone con su propuesta es un proyecto para crear un nuevo Ministerio de Cultura y Artes y dentro de éste recién se podría generar una ley que prohíba los circos con animales. El punto es que esto podría tomar mucho tiempo. Nadie garantiza la inmediatez de su cumplimiento o al menos dentro de un corto plazo.
Es por eso que es necesario no quedarnos conformes con el último mensaje del Ministro Ottone. Mientras en muchos países del mundo han terminado con los circos con animales o van en vías de prohibirlos, el gobierno de Chile tan sólo quiso dar regulaciones y las legitima mediante un reglamento a través del Concejo de la Cultura.
¿Cuál es la idea? ¿Jaulas unos centímetros más grandes? Las políticas de bienestar animal van mucho más que eso y es velar por la libertad y el justo derecho de todo animal, en especial los más salvajes, a vivir, crecer y desarrollarse en su hábitat natural. Va totalmente contra la naturaleza de ellos forzarlos a hacer maniobras o trabajos que muchas veces van asociados a duros castigos para enseñarles a hacerlo.
¿Que si queremos en circos en Chile? Por supuesto, pero sin animales
Este miércoles 11 de mayo se ha convocado a una manifestación contra el cautiverio animal a las 19:00 hrs, la cual se congregará en Alameda con Ahumada