Empleabilidad: ¿Cuáles son las necesidades de un mundo laboral globalizado?

Atrás quedaron los tiempos en que las grandes empresas e industrias buscaban trabajadores que sólo manejaran máquinas. La especialidad de una persona en el mundo laboral, desde el empleado que está en la parte más baja de la pirámide, hasta el gran gerente general o director hoy no está formada únicamente en sus áreas de estudio y conocimiento. Existen competencias de empleabilidad que permiten mostrar una formación integral y que apalanca ciertas áreas de conocimiento que no se tocan dentro de la particularidad de una carrera.

Hoy, las Universidades e Institutos forman profesionales y especialistas con una preparación para entrar a un mundo laboral globalizado. Este es un trabajo que no solo va en la malla curricular, si no que en elementos y capacidades diferentes, que les permita insertarse en un mundo laboral muy diferente al que existía en el mundo décadas atrás.

Las más grandes casas de estudio del mundo han adoptado diferentes marcos que permiten evaluar y desarrollar procesos de integración de competencias de empleabilidad en la formación de profesionales y técnicos. En Latinoamérica la más elegida es el Marco de Tuning, el mismo que eligió Duoc UC para implementar a partir del 2017.

Este Marco cuenta con 27 competencias recomendadas para trabajar dentro de la formación académica, y Duoc UC como Instituto Profesional con más de 95 mil alumnos y con una ocupación de exalumnos del 87%, además de saber que casi dos tercios de los estudiantes de inicio son primera generación en su familia que ingresa a la educación superior, hemos tomado 8 de ellas como referentes para implementar y que calzan más con el tipo de formación que entrega Duoc UC: Capacidad de trabajo en equipo; capacidad de motivar y conducir hacia metas comunes; habilidades para buscar, procesar y analizar información procedente a diferentes fuentes; capacidad para identificar, plantear y resolver problemas; capacidad creativa; habilidades interpersonales; capacidad de comunicar en un segundo idioma y la responsabilidad social y compromiso ciudadano.

Todas ellas, trabajadas de una forma que no signifique un cambio drástico en el método aprendizaje de los alumnos, serán puestas en práctica con ciertos niveles de dominio, ya que parte de este desafío es comprender que no todos los estudiantes y profesionales tienen que tener el mismo perfil vocacional y que las capacidades varían según su marco social e intereses.

Para Chile y para el mundo sería un logro que el total de egresados de todos los centros de estudio salgan con competencias y herramientas efectivas que les den posibilidades de insertarse y ejercer en la carrera que ellos eligieron, con relativa normalidad y facilidad. Debemos preocuparnos de graduar egresados íntegros en su especialidad, pero tanto o más para insertarse en esta sociedad o en cualquier entorno y mercado laboral que él decida. Está en los formadores graduar a los estudiantes listos para trabajar en un mundo globalizado, del cual hoy nadie puede escapar. Ese es nuestro desafío, entregar las herramientas necesarias y generar planes de estudio a un plazo determinado que permitan hacer real la integración de competencias blandas para lograr una empleabilidad y opciones de realización más reales y eficientes, tanto para la industria como para los profesionales de nuestro país.