MEO se vendió al sistema y recibió financiamiento de SQM
El caso Penta fue bastante más honesto, ya que repartían plata a sus simpatizantes políticos y con quienes tenían una conexión ideológica.
José Francisco Cuevas Vila es Ingeniero Comercial Magister en Economía UNAB -IEDE, Cursando Maestría en Política Económica en el SMC University
Es desilusionante y da vergüenza el actuar de Marco Enríquez-Ominami, líder del partido Progresista, luego de conocer que emitió junto a su mano derecha Cristian Warner alrededor de 36 facturas ideológicamente falsas por servicios no prestados entregadas a la empresa SQM Salar por un monto aproximado de $ 360.000.000.
Dicha empresa es propiedad de Ponce Lerou, yerno de Pinochet, rival ideológico de toda la izquierda Chilena y en particular de Marco. Esto con el fin de financiar su campaña presidencial entre Marzo del 2011 y Diciembre del 2013, así como también a su partido político, el PRO. Al parecer estiró la mano y cerró los ojos, lo peor es que lo hizo en reiteradas ocasiones.
El que tenía un discurso tan convincente y tan reformista que convocaba a cambiar Chile, su preocupación por mejorar salud y educación pública, además de su preocupación por la calidad de vida de los más pobres, al mismo tiempo era financiado por uno de los grandes poderes económicos de Chile.
Era un político con grandes aspiraciones y proyecciones, pero vendió sus banderas e ideales justificando que era la única forma de competir contra los candidatos de los grandes poderes económicos, siendo el financiado también por ellos. Paradójicamente sus rivales políticos e ideológicos.
Con la justificación del porqué decidió recibir financiamiento agrava la falta, ya que bajo ese concepto esta todo permitido. Tendrían todos los políticos chipe libre e intereses creados. Y nadie podría ser cuestionado. Orpis también podría alegar bajo este concepto que las platas recibidas por Corpesca era su única manera de ser reelegido.
Lamentablemente MEO, representa a esa izquierda Chilena burguesa, que tiene la tiene la patudez de dar cátedras de desigualdad y pobreza, siendo parte del 5% más rico. Poseen redes con los más altos poderes económicos y dicen querer un Chile más solidario, con la plata de otros. Que magnifica es la solidaridad así.
Se negó a autorizar la apertura de sus cuentas corrientes y queda con firma quincenal y arraigo nacional como medidas cautelares. No es culpable, esta solo formalizado, pero con esto no se diferencia de los políticos que tanto ha criticado.
El caso Penta fue bastante más honesto, ya que repartían plata a sus simpatizantes políticos y con quienes tenían una conexión ideológica.
Estamos refiriéndonos a alguien que ha postulado y quiere ser Presidente de la República, por tanto la exigencia hacia él debe ser de los estándares más altos.