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Actualizado el 25 de Noviembre de 2020

El peligro de un diagnóstico apresurado

También descubrimos que Start-Up Chile causó que los emprendedores chilenos mejoraran significativamente su confianza para crear emprendimientos más audaces, y su capacidad para descubrir oportunidades más valiosas. Ambas características son clave para el desarrollo socioeconómico.

Por Michael Leatherbee
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Michael Leatherbee es Director Académico EPIC Lab UC

Hace poco un medio nacional publicó una reportaje que presentaba un estudio del efecto que el programa Start-Up Chile ha tenido sobre el ecosistema de emprendimiento nacional. Esta nota induce a concluir que el programa no tiene impacto alguno. Me parece importante hacer notar que una conclusión como esta es ingenua.

Desde el año 2013 he investigado el efecto causal de este programa junto a Juanita González-Uribe, economista del London School of Economics y Charles Eesley, académico de Stanford University. Me parece relevante compartir algunos de los resultados de nuestras investigaciones ya que presentan una perspectiva más profunda que la ofrecida por la nota aludida y permiten llegar a una conclusión más robusta.

Usando métodos experimentales de frontera descubrimos que uno de los sub-programas de Start-Up Chile causaba que sus emprendimientos mejoraran de manera significativa y relevante las variables de desempeño más importantes. El programa aumentó la probabilidad de levantar capital entre 21 y 45%, el monto del capital levantado entre tres y seis veces, la valuación de los emprendimientos en cinco veces, la tracción de mercado en 24% y la creación de empleos en 200%. Como consecuencia de estos descubrimientos, hace un año Start-Up Chile extendió el sub-programa a todos sus participantes.

También descubrimos que Start-Up Chile causó que los emprendedores chilenos mejoraran significativamente su confianza para crear emprendimientos más audaces, y su capacidad para descubrir oportunidades más valiosas. Ambas características son clave para el desarrollo socioeconómico.

Más aún, descubrimos que después de haberse creado Start-Up Chile, la constitución de nuevas empresas aumentó en un 6% en localidades e industrias cercanas al programa, en comparación con localidades e industrias no relacionadas a Start-Up Chile. Es decir, la evidencia indica que Start-Up Chile tuvo un efecto en la creación de empresas que no hubiese ocurrido en su ausencia.

Es muy importante que como país evaluemos las políticas públicas para asegurarnos que los recursos destinados estén cumpliendo los objetivos buscados. Sin embargo, las evaluaciones deben hacerse con cuidado y rigurosidad. De lo contrario, podemos tomar decisiones apresuradas basadas en diagnósticos equivocados. Como realizar un trasplante de riñón a un paciente que tiene un resfrío.

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