La contradicción de auspiciar la Teletón y ser tan poco solidario con los trabajadores
Lamentablemente la concentración económica, cortesía de la Concertación, que permitió una cantidad de fusiones y adquisiciones, dejó en manos de muy pocos unos tremendos imperios, lo que ha significado un deterioro en los salarios reales de los trabajadores y como estas empresas dan empleo, hoy es imposible interpelarlas.
José Francisco Cuevas Vila es Ingeniero Comercial Magister en Economía UNAB -IEDE, Cursando Maestría en Política Económica en el SMC University
Resulta anecdótico que la preocupación más importante hoy sea que la huelga de Sodimac no impacte a la Teletón, ya que la empresa es auspiciador y su imagen está en juego. Los trabajadores llevan 21 días en huelga pidiendo un aumento en los salarios de UF +7% y $ 500.000 por bono termino de conflicto, ya que no son pocos los que han recibido una liquidación de solo $12.000. La cifra es miserable porque en su mayoría los trabajadores son jefes de hogar y de sus ingresos depende el presupuesto familiar.
Esta huelga se está radicalizando porque no han sido escuchados y han tenido muy poca cobertura. Incluso, algunos trabajadores comenzaron una huelga de hambre sin líquidos, lo que es una situación grave que hay que atender urgente, sobre todo porque llevan ya 4 días en este estado.
Evidentemente, Homecenter Sodimac puede decir que ha tenido un mal 2015 y 2016 al igual que muchas empresas nacionales, pero sí tuvo utilidades. Es una empresa que ha podido crecer y tener sucursales en América Latina, como en Argentina, Colombia y Brasil.
Sin embargo, aquí existe un dilema ético. ¿No puede una gran empresa como ésta pagar más a sus trabajadores? Yo creo que sí. Lamentablemente, cuando el recurso más importante y por excelencia, como son los trabajadores, no son bien remunerados y valorados se generan estos conflictos, que terminan en huelgas. Y eso que estamos hablando de una gran empresa a nivel latinoamericano.
Las empresas tienen una responsabilidad social y los primeros en la lista son los trabajadores de la empresa. Ahora existe una clara contradicción entre ser auspiciador de una campaña solidaria como es la Teletón y ser tan poco solidario con sus propios trabajadores, de quienes depende directamente su rentabilidad.
Son este tipo de empresas las que cree la Presidenta Michelle Bachelet y expertos incumbentes de las AFP que van a pagar el 5% adicional de las imposiciones de los trabajadores. Cuando se aterrizan los temas desde una comisión a la realidad, ese 5% adicional significará un impuesto al trabajo.
Lamentablemente la concentración económica, cortesía de la Concertación, que permitió una cantidad de fusiones y adquisiciones, dejó en manos de muy pocos unos tremendos imperios, lo que ha significado un deterioro en los salarios reales de los trabajadores y como estas empresas dan empleo, hoy es imposible interpelarlas.
La importancia de mayor competencia y entrada de nuevos actores es fundamental, ya que quieran o no, para poder operar las nuevas empresas necesitaran trabajadores y para que estos dejen su actual trabajo deberán compensar con mejoras salariales. Este es el mayor beneficio de la competencia.
Las grandes empresas deben cruzar la frontera, ya que son los llamadas a tener una conducta ejemplar y deben ser un modelo a seguir por las pequeñas y medianas empresas. Así avanzaremos hacia un desarrollo económico con país social.