Rechazo a Dominga: poder del dinero no doblegó institucionalidad ambiental
La paralización del proyecto Minero Dominga es, a su vez, una gran oportunidad para profundizar el turismo ecosocial y un nuevo modelo de desarrollo en la comuna de La Higuera, especialmente en el sector de Los Choros. Tanto el Estado como los privados deben impulsar proyectos que respeten la gran biodiversidad de la zona, la que es reconocida mundialmente.
Cuando ya nos preparábamos para una batalla de más largo aliento en la paralización del proyecto Minero Dominga, la Comisión de Evaluación Ambiental de la Región de Coquimbo nos sorprendió gratamente este jueves 9 de marzo al rechazar la solicitud de Resolución de Calificación Ambiental (RCA).
La votación de cada una de las 12 autoridades (10 seremis + Intendente + director del Servicio de Evaluación Ambiental [SEA]) involucradas en el destino de la iniciativa de la empresa Andes Iron tuvo tanto o más suspenso que la definición de un partido a penales.
Tanto para los manifestantes que se encontraban en el exterior de la Intendencia como para quienes estaban presentes en la sesión, la expectación se activó a niveles sorprendentes cuando percibieron que la autorización se disputaba voto a voto. El clímax se produjo al concretarse un inédito empate a 6 votos.
Ante el inesperado escenario, pero fiel a la normativa que regula este tipo de encrucijadas, le correspondió al Intendente Claudio Ibáñez dirimir la controversia. Su decidido y comprometido voto en contra desató inmediatamente la algarabía de los opositores al proyecto.
La decisión final de la Comisión de Evaluación Ambiental de la Región de Coquimbo devuelve en parte la confianza perdida hacia la institucionalidad medioambiental, ya que demuestra que sí se puede poner a raya el poder económico.
Hay que destacar el rol jugado por la Conaf regional, quien con sólidos argumentos técnicos y jurídicos enfrentó al SEA por haber excluido sus observaciones negativas hacia el proyecto y por desacreditarla como organismo competente, por ejemplo, en el ámbito marino de la Reserva Nacional Pingüino de Humboldt. Pese al rechazo a Dominga, seguiremos analizando el recurrir a la Contraloría para subsanar esta ilegalidad. El SEA no ejerce control jerárquico ni supervigilancia sobre Conaf.
La paralización del proyecto Minero Dominga es, a su vez, una gran oportunidad para profundizar el turismo ecosocial y un nuevo modelo de desarrollo en la comuna de La Higuera, especialmente en el sector de Los Choros. Tanto el Estado como los privados deben impulsar proyectos que respeten la gran biodiversidad de la zona, la que es reconocida mundialmente.
El nuevo desafío apunta a confirmar el conflicto de interés y la negociación incompatible que pesa sobre Sebastián Piñera, quien durante el año 2010 figuraba como socio de la minera y Presidente de la República. Esto explica porque el ex Mandatario, saltándose la institucionalidad medioambiental, bajó a título personal el proyecto termoeléctrico Barrancones que pretendía instalarse en un sector cercano a Dominga. Esta será una de las tareas de la Comisión Investigadora Dominga si se aprueba la próxima semana por la sala de la Cámara de Diputados.
También hay que estar muy atentos al rol de la justicia, la que el mismo día que se rechazó la RCA a Dominga, objetó el recurso de Piñera que buscaba impedir la ampliación de la investigación a esta arista, tras la querella del diputado Hugo Gutiérrez. Y es muy probable que, asimismo, la indagatoria aporte mayores luces sobre el rol jugado por el exsubsecretario de Minería de Piñera, Pablo Wagner, y los pagos que recibió del Grupo Penta, principal dueño de Andes Iron.
Piñera y su amigo del alma, Carlos “Choclo” Délano deben estar de muerte, porque el tiro les está saliendo por la culata, especialmente a Délano, porque se está quedando sin pan ni pedazo, a diferencia del ex mandatario que ya obtuvo su tajada tras retirarse de la propiedad minera. De todas formas, no hay peor drama para los avarientos que perderse un jugoso negocio y que la justicia les pise los talones. Este parece ser el karma de Piñera.