El comienzo del futuro
"Es justamente en instancias de Centros de Formación Técnica, universidades regionales y el aprovechamiento positivo de la diversidad natural y cultural que tenemos en el país y en el Empoderamiento Regional, donde se encuentra la solución a este grave centralismo y concentración".
Antonio Horvath Kiss es Senador de la República por Aysén
Después de muchos años de anhelos y sueños de la Región de Aysén de la Patagonia de tener su universidad propia, finalmente se consiguió dicho objetivo; su Año Académico fue inaugurado por la Presidenta de la República. Con ello se inician carreras universitarias completas en el área de Trabajo Social, Enfermería, Obstetricia e Ingeniería Forestal, Industrial y Agronomía.
Un tema muy relevante ha sido asociar a la creación de esta universidad relaciones internacionales duraderas, como es el caso del convenio que se firmó antes de que se fundara por ley con la Universidad Técnica de Berlín y con ocasión de la fundación del Instituto Internacional de Innovación Aysén Patagonia.
Por sí misma la Región de Aysén constituye un laboratorio natural y cultural para todo tipo de emprendimiento académico, de investigación e innovación.
Con años de anticipación, y una muy buena predisposición, la Universidad Austral creó en la ciudad de Coyhaique el Campus Patagonia, que también tiene carreras universitarias completas que se realizan desde nuestra región y en que algunas se pueden terminar en sus otros centros de Puerto Montt y Valdivia.
Originalmente, en la discusión de la creación del Ministerio de Ciencia y Tecnología, no se han considerado la representación de éste en las distintas regiones del país, sino solo en cuatro macrozonas. De materializarse, esto constituiría un grave error, porque en todas las regiones de Chile existen universidades estatales y públicas –y también privadas– que desarrollan una importante labor en estas áreas; por lo tanto, para empoderar a las personas y las vocaciones de cada una de las regiones, resulta importantísimo tener esta instancia, no tanto del punto de vista institucional o burocrático, sino que efectivamente que hayan personas y cargos dedicados a las ciencias, la tecnología, la investigación e innovación.
Con alta probabilidad el Censo que se acaba de aplicar va a volver hacer manifiesto el agudo centralismo que padecemos en Chile y sus consecuencias negativas en la Región Metropolitana, que entre otros indicadores han quedado de manifiesto a través de los denominados ghetos verticales. Los que defienden esta “solución habitacional” no se hacen cargo de frenar el origen, como son los motivos de la inmigración a la gran ciudad.
Es justamente en instancias de Centros de Formación Técnica, universidades regionales y el aprovechamiento positivo de la diversidad natural y cultural que tenemos en el país y en el Empoderamiento Regional, donde se encuentra la solución a este grave centralismo y concentración.