No todas las chilenas tienen acceso a pastilla del día después
"No es cierto lo que dice la derecha. No es cierto que para prevenir embarazos no deseados en las tres causales para aborto terapéutico, exista la pastilla del día después, porque fueron ellos mismos quienes se encargaron de que no estuviera al alcance de todas las chilenas".
Janet Noseda es Psicóloga. Magister en psicología clínica. Especialista en género y diversidad sexual.
Las veces que he requerido tomar la pastilla del día después, lo he hecho rápido, pues sé que a medida que pasan las horas, disminuye la eficacia de la pastilla. Pido una hora al médico, pago el bono y luego pago los 15 mil pesos que vale en la farmacia pero últimamente he pensado que soy afortunada por tener esos recursos monetarios que me permiten prevenir un embarazo no deseado. Sin embargo, en mi corazón está la inquietud, ¿qué pasa con esas mujeres vulnerables, de menos recursos, que no pueden pagar un médico particular ni los 15 mil pesos que vale la pastilla?
Yo trabajé en un servicio de salud público, en la red de salud sexual y reproductiva, donde repartíamos la píldora del día después (PAE) a los consultorios. Recuerdo que en el año 2008, la derecha intervino para que por ley, los consultorios no entregaran más la PAE, alegando que era abortiva. Tuvimos que correr a la bodega a sacar todas las PAE. Después, como forma de no dejar a las usuarias de sistema público sin esta pastilla, se decretó que serían los Alcaldes quienes decidirían si en sus comunas se entregaría la PAE. Es decir, el que esté disponible para las mujeres del sector público, depende de las creencias personales de los Alcaldes. De hecho hay muchas comunas que no entregan la PAE. Hay muchas mujeres de escasos recursos que no tienen acceso a prevenir un embarazo no deseado. No es cierto lo que dice la derecha. No es cierto que para prevenir embarazos no deseados en las tres causales para aborto terapéutico, exista la pastilla del día después, porque fueron ellos mismos quienes se encargaron de que no estuviera al alcance de todas las chilenas. Es cierto que en caso de violación se entrega, pero no todos los casos de violación se denuncian. De hecho el 74% de violaciones son a menores de catorce años en el contexto de incesto, donde las niñas guardan este secreto.
Me entristece pensar que no todas las chilenas pueden hacer como hice yo, de pagar la pastilla y prevenir un embarazo que no deseo. Me entristece pensar que deben ir a urgencias o al consultorio, esperar horas mientras ven que pasa el tiempo y la posibilidad de que la pastilla no haga efecto, es cada vez mayor y que cuando retiren el medicamento, se den cuenta que el Alcalde dio la instrucción de que en su comuna no se repartiría la PAE. ¿Qué pasa si no tiene dinero para comprarla?, ¿se ve forzada a embarazarse, aun siendo una persona recursos?
Creo que en términos de salud reproductiva, a las mujeres chilenas se nos discrimina y hay una desigualdad que duele. Yo quiero que todas, sin importar la plata que tengamos, podamos acceder a la pastilla del día después. Algunos argumentarán que usemos condón. Bueno pues las veces que he necesitado la PAE fue porque el condón se rompió. Esa es la realidad. Los condones se rompen y las pastillas anticonceptivas no son efectivas al 100%. ¿Por qué cuando se trata de embarazos, no podemos decidir libremente las acciones a tomar?
Creo que esto es recomendable de considerar al momento de escuchar los argumentos de la derecha para impedir se apruebe el aborto en tres causales. No todas tenemos acceso a la pastilla anticonceptiva de emergencia. Muchas mujeres se ven expuestas a continuar con embarazos que no desean. Muchas mujeres se embarazan esperando horas en el consultorio a que un médico le pueda dar la receta. No es justo que yo por tener un poco de recursos, pida una hora en un centro médico, me atienda lo antes posible y compre sin más la pastilla. Yo quiero que todas tengan esa oportunidad.
En término de los derechos sexuales y reproductivos, las mujeres chilenas estamos expuestas a leyes injustas. No sólo no tenemos acceso a aborto terapéutico, sino que cuando se trata de embarazos, no tenemos acceso a la pastilla de emergencia. Ojalá alguno de los candidatos a la presidencia tenga en cuenta esta injusticia con las mujeres de Chile y se tomen acciones para asegurar salud sexual y reproductiva.