Desafíos del cambio climático
"El tema ambiental es de tal envergadura respecto a los desafíos que tenemos que por sí solo se posiciona en un plano ético y épico".
Antonio Horvath Kiss es Senador de la República por Aysén
En un foro organizado por la agencia española de noticias EFE y la empresa Acciona, dedicada a las energías renovables no convencionales, se dio la oportunidad de adelantar y debatir temas entre los distintos programas presidenciales en materia de cambio climático, y de cómo hacerse cargo de ello en Chile.
En la ocasión hicimos énfasis en el rol que le compete a nuestro país en la disminución de los gases de efecto invernadero, así como en la adaptabilidad, resiliencia y oportunidades que se generan en cada uno de los rincones del territorio nacional.
Respecto a los Acuerdos de París cabe consignar que los compromisos adoptados por el Estado chileno son muy modestos, pudiendo ser más profundos; considerando por ejemplo nuestro potencial energético solar en el desierto de Atacama, que como mínimo tiene 100 mil Megawatts que Chile puede ofrecer como una oportunidad para mitigar los efectos del cambio climático.
Del mismo modo, ocurre en relación a la reforestación. El año 2016 en Chile se quemaron 117 mil hectáreas y se forestaron menos de 10 mil, a las que se sumaron bruscamente más de 500 mil hectáreas este año 2017. El país tiene para ofrecer entre 3 y 5 millones de hectáreas para forestación asociada a la recuperación de bosque nativo, que tiene un efecto no solo ecológico, sino también en la recuperación de suelo y agua, además, en la generación de empleo femenino en los viveros cerca de sus hogares y masculino en terreno, a lo que se añade la generación de un recurso de carácter productivo.
Respecto a los efectos del cambio climático en Chile, los que son cada vez más evidentes y se están adelantando a los resultados del modelo del panel internacional hasta el año 2100, el que refleja en dos escenarios el cambio que se va a producir en la agricultura y ganadería, donde esta va a ir ganando terreno hacia el sur y disminuyendo en el norte debido a la carencia de agua, con los mismos efectos en la parte forestal, más algunas variaciones bruscas en los recursos pesqueros.
Por otro lado, la disminución en los caudales, y de manera simultánea el cambio provocado por el alza de la línea de nieve, genera mayores riesgos que también sufre nuestro país. Por ello se tienen que realizar planes concretos que doten al país de una institucionalidad asociada a investigación e innovación que se haga cargo de la prevención y de la implementación de acciones tendientes a evitar que los daños causados alcancen magnitudes como las calamidades que hemos conocido, así como la buena gestión del agua.
Frente a la pregunta de los españoles de si la preocupación por el medioambiente se asociaba ideológicamente más a la izquierda o la derecha puedo precisar. Sin duda esa es una pregunta del pasado. El tema ambiental es de tal envergadura respecto a los desafíos que tenemos que por sí solo se posiciona en un plano ético y épico. Además citando en otro contexto a Nicanor Parra que cumplió 103 años, “la izquierda y la derecha unidas, jamás serán vencidas”. El modelo neoliberal está impregnado en todos los sectores políticos de los distintos conglomerados de nuestro país. En este sentido, hay que hacer un especial esfuerzo para conseguir que todos los actores de la sociedad se hagan cargo de esto; por ello, en 1990 creamos la bancada verde. Esto se logra a través de la regionalización que facilite el empoderamiento de las comunidades, atreviéndose a planificar en forma participativa y vinculante, como son el ordenamiento territorial, el manejo integrado de cuencas y la zonificación del borde costero.