Te Deum: vergüenza nacional
"Si no está de acuerdo con la ley de identidad de género, no se cambie el nombre pero por favor, ya basta de atacar a personas que ya han sufrido una vida entera de violencia encima por un grupo que dice predicar el amor de dios".
Janet Noseda es Psicóloga. Magister en psicología clínica. Especialista en género y diversidad sexual.
Hace pocos días se llevó a cabo el Te Deum evangélico, donde periodistas fueron agredidos por guardaespaldas de pastores y uno quedó con cuello cervical. Me llama la atención que grupos que siguen las enseñanzas de Jesucristo estén tan pero tan llenos de odio. Su lucha es contra el aborto terapéutico, ley de identidad de género y matrimonio igualitario. Los vemos en las galerías del congreso hiriendo a otras personas con carteles como “Dios sana la disforia de género”, entre otros.
¿En que momento Jesús enseñó a discriminar a otros, culparlos o amedrentarlos?. Sin ser una erudita en el tema, tengo entendido que Jesús era amor y compasión y dijo que antes de ver la paja en el ojo ajeno, había que ver la viga en el propio. ¿Qué les importa que dos personas del mismo sexo se casen?, ¿qué les importa que las personas Trans cambien su nombre y sexo en la cédula de identidad?, ¿cómo tanta falta de empatía y compasión? Si ellos no están de acuerdo, pues que no se casen con un gay y que no cambien su sexo y nombre en su cédula. Punto.
¿Desde cuando una religión intenta tanto entrometerse en las decisiones de Estado? Creo que les hace falta recordar que el Estado y la iglesia están separados. Personalmente, me duele por las personas Trans, ver a evangélicos gritándoles insultos en el congreso o tildándolos de enfermos mentales. No logro encontrar el link entre las enseñanzas de Jesús y ese comportamiento.
Encima de todo, en el Te Deum, los guardaespaldas de los pastores (sí, tienen guardaespaldas), agredieran a periodistas. Pareciera que todo en ellos es odio y desde ahí se mueven. Que lástima que quienes siguen a cristo, es más, se llaman CRISTIANOS, vayan por la vida con tanto odio en sus corazones.
Me pregunto que haría Jesús en estos casos. ¿Ustedes creen que se pondría a tirar piedras a la diversidad sexual?, yo no.
Es preocupante que algunos políticos para tener más votos, se reúnan e inviten a evangélicos al Congreso, mezclando fe y Estado. Tenemos actualmente un senador pastor y varios diputados que formaron la bancada evangélica. Hágannos un favor a todos y lleven a cabo sus creencias y ritos en sus cultos, no en el parlamento. Si no le gustan los gays, no se case con un uno. Si no está de acuerdo con la ley de identidad de género, no se cambie el nombre pero por favor, ya basta de atacar a personas que ya han sufrido una vida entera de violencia encima por un grupo que dice predicar el amor de dios.
Lo más grave de todo, es que senadores y diputados reciben a esos fanáticos y los escuchan. Basta ver las intervenciones del senador/pastor Iván Moreira: “voto en contra por mi creencia en dios”. ¿No es esto notable abandono de deberes?
Consecuencia señores evangélicos, consecuencia.