Las otras egresadas
Entre los 35 y 45 años se observa la mayor brecha salarial entre hombres y mujeres activos laboralmente. Es posible que ésta sea una de las razones para que en el segmento entre 40 y 54 años se concentre la mayor cantidad de microempresarias.
Sergio España Ramírez es Socio Subjetiva
Hace unos días la periodista @belenmunoz compartió un orgulloso twitter sobre su mamá que a los 48 años se habían titulado educadora de Párvulos. Un logro enorme tras haber sorteado varias situaciones complejas.
Hoy se tituló mi mamá! Decidió estudiar a los 43 años mientras mi hermano se apagaba. Durante el proceso se separó, perdimos la casa y todo lo que teníamos. Seguimos luchando por darle vida a mi hermano y falleció cuando ella estaba en cuarto. Hoy es educadora de párvulos! pic.twitter.com/7N3cLMQcBQ
— Belén Muñoz (@Belemunoz) December 4, 2018
Su caso devela una realidad que parece cada vez extendida y que caracteriza a las mujeres que a partir de los 40 años aproximadamente dan un giro -a veces inesperado- y que de una u otra manera coincide además con el fin de algunos ciclos. La separación, el fin de la etapa escolar de los hijos, los primeros problemas de salud (los achaques) señalan la oportunidad para un cambio; la búsqueda de aquello que se postergó por diversas razones o bien de caminos que parecían impensados hace algún tiempo. El estereotipo que muestra a la mujer cumpliendo un rol central de madres, sostenedoras del hogar y responsable de sus familias, tiene una parte de cierto si pensamos que la distribución de las tareas domésticas y de crianza recaen sobre todo en ellas, pero al reforzar esta imagen se suelen invisibilizar sus deseos de desarrollo personal.
Ana María (nombre ficticio) tiene 37 años y reside en la comuna de San Bernardo. Después de tener a su segunda hija, decidió ingresar a estudiar kinesiología en una universidad privada. Sin embargo, su anhelo se vio truncado por la decisión de cierre de la universidad donde estudiaba, lo que de paso la impulsó convertirse en dirigente estudiantil. Todo este esfuerzo por cierto ha significado importantes tensiones con su pareja y da cuenta de los obstáculos en especial para mujeres de estratos medios o bajos cuando se deciden a buscar un mayor desarrollo personal y profesional. Solo un 10% de las mujeres mayores de 40 años tienen estudios universitarios completos [1].
Los 40 marcan un giro también en el campo laboral. Un 45 % de las mujeres entre 40 y 50 años se declara satisfecha con su trabajo, lo que marca un declive con el tramo estario anterior. Pero además entre los 35 y 45 años se observa la mayor brecha salarial entre hombre y mujeres activos laboralmente. Es posible que ésta sea una de las razones para que en el segmento entre 40 y 54 años se concentre la mayor cantidad de microempresarias (14%), aunque siempre a importante distancia de los hombres (Encuesta de Micro emprendimiento 2017). La búsqueda de una oportunidad de mejora económica y desarrollo que no señale tantas barreras de entrada como el mercado laboral en lo que refiere al cuidado de los hijos, por ejemplo.
Los obstáculos no son pocos. Patricia, trabajó durante su vida en múltiples lugares y llevó a cabo algunos emprendimientos. Uno de los que más le costó levantar fue un taller de bicicletas porque una mujer que arreglaba bicicletas no era bueno. A pesar de que tenía experiencia, había trabajado antes en el rubro y hacía bien el trabajo, tuvo que poner un biombo separando la recepción del taller, donde supuestamente estaba el mecánico, que no era otro que ella misma cuando se iban los clientes… Solo así su negocio empezó a prosperar y aumentaron considerablemente sus ingresos.
En estos días, en que muchas madres se afanan entre las actividades de fin de año de sus hijos, los quehaceres del hogar y el cierre del año laboral, algunas reciben –además- el premio a su esfuerzo por hacer un giro, como es el caso de la mamá de Belén. Los obstáculos que deben enfrentar y la falta de apoyos son enormes, una realidad muchas veces invisibilizada políticamente. No hay tiempo para nada más que no sea salir adelante y vencer la valla que les impone el día. Felicidades a la “otras graduadas”.
[1] Todos estos antecedentes forman parte del estudio Mujeres 40+, indagación sobre quiebres, giros y estrategias que lleva a cabo Subjetiva.