Ómicron y la política: ¿qué es más importante?

Mientras en Chile se desarrolla una vertiginosa campaña por la presidencia, el mundo se encuentra en alerta por la aparición de una nueva variante del virus Sars Cov 2. Cuando los candidatos reclutan a emblemáticos personajes de la política y de los gremios de la salud, el mundo se prepara para el efecto que puede provocar la nueva variante Ómicron, conocida científicamente como B.1.1.529.

La OMS (Organización Mundial de la Salud) señala que la evidencia preliminar sugiere un mayor riesgo de reinfección con esta variante y la comunidad internacional se encuentra tomando medidas inmediatas, como suspensiones de vuelos de Europa a Sudáfrica, por lo pronto.

Como Movimiento Burdeos, consideramos que estamos frente a una situación muy compleja y que requiere de un plan de acción que impida que nuestro país sufra los efectos de una nueva ola de esta pandemia. Esto requiere de un compromiso país con la activación de medidas que impidan o retarden la llegada de esta nueva variante a nuestra nación, un compromiso con la mantención de una capacidad de respuesta sanitaria mediante la recontratación de los profesionales y técnicos necesarios para el combate a la pandemia, como también con la mantención y extensión de la red nacional de laboratorios que realizan los testeos de COVID- 19.

Nos preguntamos de inmediato; ¿será efectivo nuestro esquema de vacunación frente a Ómicron?, ¿tendremos la capacidad de articular el sistema de salud para entregar cobertura de camas UCI?, ¿contaremos, nuevamente, con los testeos necesarios en nuestros laboratorios de biología molecular, con radiografías y tomografías computarizadas de Tórax de ser necesario? La incertidumbre y el temor se instalará nuevamente sobre nuestros ciudadanos y es el momento de que los candidatos presidenciales se pronuncien respecto de sus propuestas, ojalá basadas en la evidencia científica y con amplia participación de la ciudadanía, sociedades científicas, colegios profesionales y gremios de la salud.

Nos preocupa que estas materias no estén en la discusión y que no se esté trabajando para evitar los riesgos de una eventual tercera, cuarta o quinta ola del COVID-19. El país exige seriedad de los candidatos presidenciales.