Es puro no querer
Durante estas semanas surgen varios casos merecedores de esta frase, especialmente en el mundo económico y empresarial. Uno esperaría que tras el triunfo de Boric, hubiera un cierto período de reflexión. Pero nada o poco de eso ha sucedido. Nada de saludos protocolares o buenos deseos de rigor. Varios dirigentes empresariales han creído que la mejor defensa es el ataque y han decidido que es bueno no solo pautear al nuevo Presidente, sino además hacerle algunas recomendaciones.
Sergio España es Periodista. Director Subjetiva
La frase la usaba mi madre cuando estimaba que alguien no hacía algo que le parecía lo correcto y buscaba atajos para hacer exactamente lo contrario a lo que se había comprometido.
Estas semanas surgen por varios casos merecedores de esta frase, especialmente en el mundo económico y empresarial.
Uno esperaría que tras el triunfo de Boric, cuya magnitud superaba las predicciones de varios analistas, hubiera un cierto periodo de reflexión, no solo por una natural prudencia, sino porque se trata de un gobierno que resulta inédito en muchos sentidos tomando en consideración los últimos 30 años. La forma en que diferentes actores y organizaciones se relacionarán con esta nueva administración requiere de esa reflexión
Pero nada o poco de eso ha sucedido. Nada de saludos protocolares o buenos deseos de rigor. Varios dirigentes empresariales han creído que la mejor defensa es el ataque y han decidido que es bueno no solo pautear al nuevo Presidente, sino además hacerle algunas recomendaciones.
Al día siguiente de la elección, Diego Hernández, presidente de la Sociedad Nacional de Minería, manifestaba la preocupación del gremio por las diferencias entre programa y el discurso de Boric entre la primera y segunda vuelta, para -a reglón seguido- precisar que “la piedra de tope, lo que realmente es el elefante de la cristalería, es el tema de los impuestos”. Nada de rodeos.
Tres días más tarde el Presidente de la Confederación y el Comercio, Juan Sutil, señalaba que “tenemos el desafío de que este país pase al desarrollo. Todo eso se tiene que hacer con decisiones del Presidente electo, que con el discurso más ponderado e inclusivo, por supuesto me da más esperanza de que se pueda lograr”. Dos días antes de las elecciones el mismo dirigente afirmaba que “el empresariado no puede tener mucha simpatía por las ideas de Boric” y que su eventual triunfo podría en peligro el modelo económico. Ponderación antes y después de las elecciones…
Sebastián Edwards es consejero habitual del mundo empresarial, participante fijo de seminarios donde se develan las claves del futuro. El economista radicado en EEUU le sugiere al Presidente electo que debiera nombrar a Máximo Pacheco. Me cuesta imaginar a Boric tomando nota de la sugerencia, más aún si dos semanas antes de las elecciones presidenciales, Edwards señalaba en una entrevista a El Mercurio que “gane quien gane, va a quedar la escoba”.
Para querer (y dejar de no querer) es importante escuchar.
¿Por qué Boric logro aumentar su votación en 2.805.862 votos entre una y otra vuelta? Es posible que la moderación de su discurso y sus propuestas programáticas expliquen lo anterior, pero también puede haber influido su disposición a escuchar. La reciente encuesta Cadem realiza una pregunta abierta al respecto. Llama la atención que el 54% de las razones dadas por los votantes de Kast aluden a sus propuestas de gobierno (principalmente seguridad), mientras que en el caso de Boric éstas se distribuyen en varios aspectos (propuestas programáticas, atributos personales, posición política, etc.). Esa variedad tiene que ver con la disposición más genuina a escuchar a una sociedad que reclama ese tiempo y espacio. Quizás las fotos más simbólicas de la campaña sea la del Presidente electo en cuclillas escuchando a los niños
Los gremios empresariales tienen razón en estar preocupados. El que la derecha ha mejorado su votación en las parlamentarias puede moderar algunas de las propuestas del nuevo Gobierno, sumado a las restricciones económicas. Pero la experiencia de los retiros de fondos previsionales señala que la adscripción política no siempre es buen predictor de conductas políticas. Se requerirá más que los tradicionales recursos de influencia y lobby.
Sofofa y Confederación de Producción y el Comercio han presentado interesantes propuestas de desarrollo y crecimiento durante este año. El riesgo es que terminen en la carpeta de las bienintencionadas acciones que difícilmente lleguen a puerto por no contar con la tripulación, el barco y la ruta adecuados. Avanzar en la dirección deseada pasa por tener la voluntad de querer (querer de verdad) escuchar, tender puentes no desde la recomendación previa de lo que el otro tiene que hacer, tratar de entender el paisaje que bordea la ruta. Darse tiempo y espacio para escuchar no solo a los consejeros de siempre (que pese a que “no lo vieron venir”, mantienen la posición de vigías) y observar más directamente alguna señales que emanan desde la ciudadanía.
Los exámenes que los candidatos presidenciales ante el CEP parecen ser un recuerdo. Transmitamos a un re barajuste de poderes en un mapa mucho más amplio del que dibujamos desde 1990. “Si no va a hacer bien las cosas, mejor no hagas nada”, sentenciaba mi mamá cuando la molestia era mayor. De no hacerse cargo del muevo contexto, quizás el silencio sea lo mejor.