Símbolos patrios
Aquellos elementos rememorativos de un país, como el escudo, la bandera, el himno, entre otros, son proyecciones de lo que hemos construido como identidad a lo largo de estos dos decenios.
Jean Chevalier define la bandera como un símbolo patrimonial de la memoria que viene a sustituir la imagen de nuestros antepasados. También señala que “el escudo es una representación del universo”, que, en nuestra mirada, permite manifestar elementos visuales que rinden honor a la multiplicidad y belleza de nuestra geografía y cultura. Cirlot indica que la bandera “se coloca en lo alto de la pértiga o asta”, lo cual proyecta representativamente el más alto honor de la identidad de una nación.
Aquellos elementos rememorativos de un país, como el escudo, la bandera, el himno, entre otros, son proyecciones de lo que hemos construido como identidad a lo largo de estos dos decenios. Justamente a dos semanas de celebrar las fiestas patrias, veremos cómo se utiliza la bandera en un sinnúmero de lugares.
Por lo mismo, resulta fundamental replantearse sin liviandades el peso cultural e identitario de la iconografía de los símbolos que representan nuestro país, en cuanto a sus permanencias en la memoria ciudadana y sus usos, ya que no solo es el objeto como valor, sino lo que simbólicamente se proyecta en este y lo representativo que es para nuestra historia. De lo anterior, somos nosotros quienes debemos dar garantías de su cuidado.
Asimismo, no hay que perder los márgenes de lo que somos y de donde venimos, no podemos ser una ciudadanía sin rumbo y sin memoria; nos debemos por respeto a quienes lucharon, representaron con su talento o rindieron en el pasado honores a ella, por quienes ya no están, y que son recordados a través de nuestro patrimonio rememorativo e histórico.