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7 de Marzo de 2023

Reforma tributaria: puntualizaciones

En vez de corregir esta distorsión injusta, la Reforma profundiza la inequidad, al desintegrar el sistema para quienes no sean Pymes. Grava además el ahorro que las empresas dueñas de las sociedades operativas (Pymes) tengan.

Como si lo anterior no bastara, se quiere aumentar la burocracia, restándole al Fisco un promedio de 500 millones dólares, para beneficiar los proyectos que decida un comité de 3 personas designadas por el ejecutivo. AGENCIA UNO
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Christian Aste

Christian Aste es Abogado

Amparándose en la brecha que habría con la OCDE, se propone aumentar y significativamente la carga tributaria de los más ricos, aduciendo que el aumento de tasas en el Impuesto único de Segunda Categoría y Global Complementario sólo afecta al 3% de la población, y el impuesto a los super ricos a menos del 1%.

Se omite sin embargo decir, que esta brecha que existe con la OCDE es en los impuestos personales, porque en Chile, a diferencia de los países OCDE, el impuesto a las personas no es soportado por todos, sino qué por un porcentaje ínfimo de ciudadanos, que son curiosa y precisamente los mismos que terminarán pagando esta reforma. Tan es así, que en Chile el impuesto a las personas recauda un 81% menos que lo que recauda en los países OCDE (1,5% versus 7,9%), circunstancia que responde a la poca renta que percibe la mayoría de la gente. El gobierno tampoco dice que hoy ya existe una brecha y que muy injusta y que se produce al comparar lo que paga el empleado, entre ellos las autoridades políticas – burócratas – que viven de un sueldo, cuyo impuesto es retenido por el empleador, y lo que pagan los que emprenden.

En efecto, y aunque no se crea, por la misma riqueza el trabajador paga menos impuesto que el que paga el emprendedor. Lo hace, porque mientras el trabajador deduce gastos, el emprendedor debe incrementar la base de su impuesto con lo que retira más el crédito. Solo por ese hecho, paga una mayor renta. Si tiene la mala suerte de tener un socio que lo contamina, la empresa aunque tenga ingresos menores a 75.000 UF, se rige por las mismas reglas que la gran empresa, y por lo tanto paga aún más, porque en vez de imputar contra el impuesto final el 100% del impuesto pagado por la empresa, sólo puede imputar el 65%, con la desventaja que debe sumar a la base antes de la imputación el 100% del crédito. Lo que conlleva a un mayor tramo. Esto mismo, le pasa a quien controla la Pyme por medio de una sociedad. La sociedad que controla es Pyme, pero el controlador no, por lo que no sirve que la Pyme tenga integración, y pague un impuesto menor, porque el dueño en ese caso paga como si no fuera Pyme.

En vez de corregir esta distorsión injusta, la Reforma profundiza la inequidad, al desintegrar el sistema para quienes no sean Pymes. Grava además el ahorro que las empresas dueñas de las sociedades operativas (Pymes) tengan. Se quiere también gravar al super rico, prescindiendo de que el ecosistema es circular, y que la experiencia del derecho comparado, ha demostrado que ese impuesto no solo que recauda poco, sino que resulta contraproducente, porque termina por ahuyentar el intelecto (startup) y el capital.

Como si lo anterior no bastara, se quiere aumentar la burocracia, restándole al Fisco un promedio de 500 millones dólares, para beneficiar los proyectos que decida un comité de 3 personas designadas por el ejecutivo.

Pese a que se les dijo, y majaderamente, que el crecimiento era la base del desarrollo, y que eso estaba demostrado empíricamente, no solo no lo oyeron. Tampoco se dieron el tiempo de revisar la propuesta de gravar de un modo progresivo, desintegrado y único a las empresas de régimen general, y una tasa de un 10% para las Pymes. Muchos dueños de esas empresas tienen tasas efectivas menores a ese porcentaje.

Parece un contrasentido que no se diga nada contra la informalidad que es la que provoca la evasión, y que tampoco se reduzca el aparato público. Por el contrario, se comprometen recursos, específicamente más de 100 mil millones de pesos, para la burocracia del comité que referimos y que se quiere crear con la indicación que hizo el gobierno en octubre del año pasado, y que coincidió curiosamente con la llegada a Chile de la economista Mazzucatto, la que como sabemos ha promovido en sus diversas charlas las ventajas del Estado empresario.

Debemos remarcar finalmente que el superávit fiscal del año pasado, se da luego del empujón que significó para la economía el rechazo, y en el marco de un sistema tributario, muy distinto al que se propone en la Reforma que se vota, y con el rendimiento y esto hay que subrayarlo, extraordinario de una empresa como es SQM, que demuestra y con hechos, el valor agregado que implica confiar en la iniciativa y el esfuerzo privado.

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