Pagar o no pagar: esa es la cuestión
El CAE necesita ajustes, con incentivos para quienes tienen deudas morosas, y para quienes están al día. pero no una condonación.
Hugo Lavados es Rector de la Universidad San Sebastián.
Desde que se planteó que el gobierno presentaría un proyecto de ley para condonar las deudas del Crédito con Aval del estado-CAE- la morosidad ha aumentado desde fines del 2021 al 2022 desde un 48,4% a un 54,4%. Este aumento ha llevado a 149.000, que es un 80%, la mora entre quienes no terminaron sus estudios, y a 296.000, un 47%, de quienes sí terminaron.
El CAE necesita ajustes, con incentivos para quienes tienen deudas morosas, y para quienes están al día. pero no una condonación. Ajustes en varios de sus elementos, porque es un mecanismo de ayuda a los estudiantes muy valioso, pero debe modificarse por la experiencia en Chile y otros países. Esos ajustes serían en el valor porcentual máximo de la cuota de repago, en su duración y en el pago de la deuda de los desertores. Sería positivo mirar los cambios recientes del sistema británico de ayudas estudiantiles, semejante al CAE.
Es notable que los comportamientos inducidos por los anuncios de las autoridades no sean considerados antes de los anuncios. Nuestro gobierno y el sistema político en general no parecen asumir la importancia de las expectativas sobre las conductas de las personas, a todo nivel, y que estas van cambiando con los incentivos que se perciban. Es evidente que, si se insiste que se va a presentar un proyecto de ley para condonar deudas del CAE, toda la comunidad lo que escucha es que va a existir una condonación general, las condiciones, excepciones, plazos no se consideran. Luego, la convicción es que es una tontera seguir pagando.
Claro que, como desafortunadamente esas políticas no son gratis, el Estado deberá pagar US$ 4,65 mil millones de dólares a los bancos, porque tienen su garantía, y disminuir el activo que representan las deudas en poder del Fisco, hoy no contabilizadas como tales, por US$ 6,31 mil millones. Esos US$10.957 millones tienen o no usos alternativos, según sean las preferencias Las prioridades en las políticas reflejan lo que al gobierno le importa más. Es importante reconocer a quienes se favorece, que, en este caso no son los grupos más vulnerables.
En definitiva, el proyecto del CAE con condonación y extinción (si se condona es imposible que siga existiendo el mecanismo) en la práctica va a ser innecesario, o tendrá que ser muy diferente, porque muy pocos estarán al día. Eso hará aumentar el valor a financiar por el Estado.