Bendecidos por el ranking
No podemos darnos de palmadas en la espalda diciendo que nuestra economía es de las mejores del mundo, esa época ya pasó. Ahora obviamente tenemos una economía estancada, y lo único que nos bendice es nuestra buena posición en este ranking.
Bastián Romero es investigador de la Fundación para el Progreso
«Bendecidos por los dioses» nos llama The Economist en un artículo que pone a Chile como la séptima economía con mejor desempeño de la OECD en 2023. Pero ¿cómo es posible que nuestra economía sea tan excepcional —incluso comparada a la de los países más desarrollados del mundo— si la percepción de los chilenos sobre la economía está por el suelo? ¿Tan equivocados estamos?
No estamos equivocados y no somos pesimistas. La mejora que la economía chilena ha tenido durante 2023 ha sido diminuta y atrasada en comparación a otros países.
El aumento interanual de 4,8% de la inflación subyacente indica que los precios de nuestra economía se acercan a la meta de estabilidad inflacionaria de 3%. Eso es mérito único de nuestro Banco Central que, de forma responsable, subió y bajo las tasas de interés en los momentos adecuados.
Sin embargo, la razón por la que los precios chilenos no están aumentando tanto como los de otros países de la OECD es que, durante octubre de 2022, Chile llegó a tener la séptima tasa de inflación más alta en ese grupo de 35 países. Es más fácil disminuir la inflación cuando usas una tasa ya alta como referencia. Con excepción de Turquía y algunas naciones más, la inflación del resto de la OECD en 2022 fue más moderada que en Chile, por lo que, matemáticamente, no tuvieron que disminuir tanto su tasa de inflación para acercarse a sus niveles de estabilidad.
Por otro lado, el 0,5% de crecimiento económico que indicó The Economist para Chile en 2023, acaba de quedar desactualizado con el último IPOM del Banco Central que, confirmó un crecimiento de 0% para los chilenos este año. Pero, incluso si tuviéramos ese 0,5% de crecimiento —siendo generosos— no habría nada que celebrar. 0,5% es un crecimiento mediocre que, en términos per cápita, significaría una caída de 0,14%.
De las 5 categorías que explora el ranking de The Economist, la recuperación de la tasa de empleo es en la que Chile está mejor posicionado (nº 6 de 35). Sin embargo, de forma similar a lo que pasa con la inflación, eso se debe a que la tasa de desempleo en Chile durante el cuarto trimestre de 2022 fue una de las más altas de la OECD. Es decir, teníamos más trabajos por recuperar que el país promedio de este ranking.
Aun así, el mercado laboral chileno sigue siendo uno de los más rezagados en el mundo. El 8,7% de desocupados que registramos en el tercer trimestre de 2023 es 21% más alto que el nivel prepandemia y precrisis social. Eso no es un fenómeno mundial, ya que casi toda la OECD e incluso América Latina han logrado estabilizar sus niveles de desempleo. Además, entre los empleos que sí hemos recuperado, destaca el crecimiento de los asalariados públicos que, con la contratación de más de 85 mil personas, fue 4,7 veces más rápido que el de los asalariados privados en los últimos 12 meses.
El rezago se puede explicar, en parte, por la creación de la PGU que, deshace la necesidad de trabajar para algunos jubilados. Pero, la débil inversión y su consecuente debilitamiento del crecimiento, sin duda han afectado negativamente la capacidad de crear trabajos en nuestra economía. Y los venideros aumentos en el sueldo mínimo, sumados a la rigidez de nuestro mercado laboral, podrían resultar en aún más dificultades para encontrar empleo en el futuro, sobre todo para los trabajadores con menor educación o experiencia.
No podemos darnos de palmadas en la espalda diciendo que nuestra economía es de las mejores del mundo, esa época ya pasó. Ahora obviamente tenemos una economía estancada, y lo único que nos bendice es nuestra buena posición en este ranking.