Conectando saber y práctica: reflexiones sobre investigación educativa y su impacto en la educación actual
Creemos que la transferencia es una parte fundamental del proceso de investigación, no concebida como un cierre de proyectos, sino como un esfuerzo continuo para asegurar que los resultados de las investigaciones lleguen a donde puedan tener un impacto significativo.
Victoria Espinoza y José Pablo Escobar es directora de investigación CEDETi UC e investigador asociado CEDETi UC, respectivamente
La educación constituye uno de los fundamentos de nuestra sociedad, proporcionándonos conocimientos y habilidades fundamentales compartidas por los miembros de nuestra comunidad. Sin embargo, el sistema educativo nacional ha generado numerosas interrogantes. Tomando como ejemplo la situación actual del país, los recientes resultados de las pruebas PAES nos confrontan directamente con las significativas disparidades de rendimiento de los estudiantes existentes en nuestro país. Estas discrepancias no solo se reflejan en el acceso a la educación superior, sino también en las primeras etapas del aprendizaje.
En estos días, se publicó un estudio titulado “Radiografía de la Lectura en Segundo Año Básico”, elaborado por académicas de la Pontificia Universidad Católica de Chile y la Universidad de los Andes. Este informe evidencia el rezago escolar de los estudiantes, destacando las diferencias según el tipo de establecimiento educativo al que asisten. En conjunto, estos resultados subrayan la difícil realidad que nos obliga a reflexionar sobre la capacidad de nuestro sistema para ofrecer una respuesta educativa adecuada a las necesidades de todos los niños, niñas y jóvenes que transitan por él.
En este contexto, la investigación en educación adquiere una importancia crucial, ya que a través de ella podemos describir, conocer y comprender los desafíos que surgen en el ámbito educativo. La investigación no solo nos capacita para comprender el fenómeno educativo, sino que también nos habilita para concebir e implementar nuevas estrategias de aprendizaje, basadas tanto en conocimientos como en experiencias previas. Además, la investigación en educación actúa como un puente que conecta nuestra realidad con la del resto del mundo, enfocándose en proporcionar soluciones para los problemas que enfrentamos.
Es relevante destacar que en nuestro país se realizan numerosos esfuerzos en el ámbito de la investigación educativa. Diversas organizaciones, tanto gubernamentales como no gubernamentales, se dedican activamente a la investigación. Además de los organismos estatales, existen fundaciones e instituciones privadas que llevan a cabo sus propios procesos de investigación y ofrecen fondos concursables, brindando a investigadores e investigadoras la oportunidad de obtener recursos para llevar a cabo sus estudios. Asimismo, se cuenta con el respaldo de fundaciones internacionales que contribuyen a estos propósitos.
No obstante, las opciones disponibles aún resultan insuficientes o, en algunos casos, los esfuerzos dedicados a la investigación no impactan tan directamente en la realidad de nuestros estudiantes como desearíamos. A pesar de las considerables inversiones en educación, nos encontramos año tras año con desafíos recurrentes: persisten las brechas socioeconómicas, las dificultades de convivencia en las aulas parecen intensificarse y las estrategias didácticas en la mayoría de las salas de clases permanecen inalteradas. Entonces, ¿qué podría estar faltando en este sistema? ¿Cómo podríamos fortalecer la conexión entre la escuela y la investigación?
Existen investigaciones que abordan estas preguntas, señalando la falta de vínculo entre las escuelas y los equipos de investigación como una barrera para la transferencia efectiva de resultados. En este sentido, en CEDETi UC estamos trabajando activamente para fortalecer este vínculo. Realizamos publicaciones, visitas, encuentros y seminarios, entre otras iniciativas, con el objetivo de difundir nuestros resultados de investigación y también los de otros equipos que consideramos relevantes para las comunidades educativas y las familias que las integran.
Creemos que la transferencia es una parte fundamental del proceso de investigación, no concebida como un cierre de proyectos, sino como un esfuerzo continuo para asegurar que los resultados de las investigaciones lleguen a donde puedan tener un impacto significativo.