En qué piensa el diputado Alinco (cuando sí ejerce como diputado)
El karma de René Alinco son los miércoles. Los que incluyen cualquiera de sus dos camionetas y mujeres que no son necesariamente la suya. Miércoles malditos como el 25 de agosto, cuando lo encontraron en Tejas Verdes teniendo relaciones con una desconocida -para la prensa, al menos- en su pick-up.
El karma de René Alinco son los miércoles. Los que incluyen cualquiera de sus dos camionetas y mujeres que no son necesariamente la suya. Miércoles malditos como el 25 de agosto, cuando lo encontraron en Tejas Verdes teniendo relaciones con una desconocida -para la prensa, al menos- en su pick-up. O miércoles como el 17 de noviembre, cuando lo único que quería era brindar en honor a Bielsa y terminó detenido en la 3ª Comisaría norte de Valparaíso.
Del diputado PPD se sabe poco. Que es obrero, que representa al Distrito 59 y que sabe cómo pasarlo bien. Aunque a veces termine mal. Que ha faltado a 16 de las 102 sesiones de la Cámara; seis de ellas los días jueves, siete los miércoles y dos los martes -y que éstas equivalen al 15,69% del total. Se sabe, también, que ayer estuvo hasta las cuatro de la mañana retenido por Carabineros y que, aún así, llegó a las 10.39 a sesionar al Congreso. Que aceptó las bromas de sus pares en la cafetería y, como explicó más tarde, que no quiere “ningún privilegio” adicional por ser diputado.
Sabiendo que desde 1993 que persigue un escaño, queda claro que Alinco es persistente. Que de verdad quiere ocupar el cargo. Por eso extraña que, a pesar del entusiasmo, sólo haya presentado ocho mociones en lo que va del año. La diputada UDI María Angélica Cristi, por ejemplo, tiene 16. Y el PPD Felipe Harboe, 15. De esas ocho, la única que se ha publicado es la de establecía como feriados obligatorios el 19 y el 20 de septiembre de este año.
Las siete restantes también apelan a los derechos de los trabajadores. Salvo la primera propuesta, realizada el 16 de marzo de este año: establecer nuevas sanciones contra quienes destruyan propaganda electoral. El resto de los temas que Alinco propone como proyectos de ley son relativos al seguro de cesantía en zonas afectadas catástrofe; la responsabilidad penal del empleador por accidentes laborales y -entre otros- la ampliación de las competencias de los Juzgados del Trabajo.
El diputado Gabriel Ascencio, miembro de la Comisión del Trabajo, relaciona su desempeño con su origen: “Todos entendemos que René viene del mundo obrero. Por lo tanto, sus talentos están fundamentalmente en su oratoria y su capacidad para comprender rápidamente los temas sociales”. La tecnología, eso sí, no es su punto fuerte: “Nadie puede decir que trabaje mucho con el computador. Me imagino que no trabaja con Blackberry, no sé si tiene Twitter o Facdebook. No lo veo por ese lado. pero su cabeza funciona a mil maravillas cuando se trata de orientarse en temas laborales”.
La independiente Marta Isasi, diputada de la Comisión de Zonas Extremas, coincide en su pasión por estos temas. Al punto de que, cuando discutían la bonificación de la mano de obra, Alinco defendió una postura contraria a la del gobierno, siendo un diputado oficialista. “También nos unimos en la defensa de los funcionarios de las universidades estatales -explica Isasi-, y ahí Alinco discutió con el ministro de Educación”.
La persistencia del PPD es transversal a la causa. Y a su idea de justicia. Porque, paralelo a los temas laborales y de conectividad en regiones, ha firmado 11 proyectos de acuerdo. Y dos de ellos recuerdan al Alinco fuera del Congreso: los de flexibilización para que trabajadores y estudiantes pudieran ver los partidos de la Selección en el Mundial de Sudáfrica. También apoyó, el pasado 6 de mayo, una manifestación de pesar por el fallecimiento del cantante Lucho Barrios.
Es esa pasión la que le juega a favor y en contra al Alinco diputado. Según Asencio, los argumentos de sus intervenciones son “lo que le nace del corazón”. Isasi explica que “a veces se apoya en algunos documentos, o menciona sus reuniones con tales gremios o sindicatos”. Y aunque ella valida la salida a terreno como una forma de trabajo, el diputado DC cree que no basta.
“Él pone su punto de vista y piensa que con eso es suficiente; con representar la voz del pueblo”. Y a pesar de que ésa es su carta en la Cámara, su factor distintivo, Asencio cree que “opinar en el trabajo legislativo no basta, porque el trabajo es convencer”. Algo que, según el diputado, a Alinco le resulta más difícil que a la mayoría: “su condición obrera a veces le juega en contra en un ambiente de tanto clasismo”, reconoce. Y en eso, nada tienen que ver los días miércoles.