Ordenan traslado de 700 reclusos de cárcel San Miguel
La Fiscalía Sur ordenó el traslado de al menos 700 reclusos de la cárcel San Miguel, situada en el sur de la capital chilena y donde el pasado 8 de diciembre murieron 81 presos tras una riña y posterior incendio, al penal de Colina I de Santiago.
La Fiscalía Sur ordenó el traslado de al menos 700 reclusos de la cárcel San Miguel, situada en el sur de la capital chilena y donde el pasado 8 de diciembre murieron 81 presos tras una riña y posterior incendio, al penal de Colina I de Santiago.
La orden se suma al traslado efectuado el pasado 11 de diciembre, cuando 35 internos de “alta peligrosidad” fueron enviados a un penal de la ciudad de Rancagua, a unos 85 kilómetros al sur de Santiago.
Fuentes judiciales consultadas explicaron que la instrucción emanó del fiscal de la Zona Metropolitana Sur, Alejandro Peña, en el marco de la investigación por la tragedia ocurrida en el recinto de San Miguel.
Peña está a la espera de algunos informes policiales con el fin de llevar a cabo la reconstitución de la escena (simulación) del incendio que afectó a las zona sur y norte del cuarto piso de la torre 5 del penal siniestrado.
La mayor tragedia carcelaria ocurrida en Chile avivó el debate en torno a la mala situación de las prisiones, que en muchos casos albergan a más presos de los que permite su capacidad.
El presidente Sebastián Piñera aseguró el pasado 9 de diciembre, durante la entrega del informe “Situación de los Derechos Humanos en Chile 2010” que “la situación de hacinamiento es definitivamente inhumana y absolutamente lamentable”.
Según ese informe, la sobrepoblación en las cárceles chilenas alcanza el 55% y 23 de los 101 centros penitenciarios del país acogen al doble de reclusos para los que fueron construidos.
En la cárcel de San Miguel, por ejemplo, había 1.961 prisioneros cuando estalló el incendio, aunque las instalaciones eran para 1.100 reclusos.