Sepa cómo será el indulto propuesto por el Gobierno

A tres meses de la tragedia carcelaria
en el penal de San Miguel, el Gobierno presentó cuatro medidas para
descongestionar las cárceles del país y una propuesta de “acuerdo
nacional”, para lograr un consenso político que permita a personas mayores de 80 años o con
enfermedades terminales acceder al indulto. 

 

El ministro de Justicia, Felipe Bulnes,
fue el encargado de dar a conocer el proyecto en una ceremonia
realizada en el palacio de La Moneda, que contó con la presencia del
Vicepresidente Rodrigo Hinzpeter.

 

La primera determinación sería
realizar un indulto conmutativo, que no extingue la pena, pero permite cumplirla fuera de prisión. Este beneficiaría a todos los
reos que actualmente estén con reclusión nocturna o que hayan
cometido delitos menores.

 

Dentro de esta medida se contempla un
indulto especial para mujeres recluidas, para quienes podría hacer
extensivo el beneficio si han realizado más de dos tercios de su
condena y durante los últimos 12 meses han tenido buena conducta.

 

En ambos casos los reos deberán asumir un compromiso de no delinquir, y quedarán durante 5 años sujetos al control de Gendarmería. 

 

Precisar los criterio para la libertad
condicional es otra de las iniciativas anunciadas por el ministro de
Justicia. Con esto se pretende revisar lo que plantea la ley sobre este beneficio y, a su vez, dejar en manos de jueces tal determinación, no en la de los Seremis de Justicia.

 

El ministro Bulnes también se refirió
a regular las penas inferiores a un año. El secretario de Estado aseguró que una
persona condenada podría realizar trabajo comunitario en vez de ir a
un recinto penal.

 

Por último, Bulnes presentó una
modificación a la ley a favor de quienes no pueden
pagar las multas impuestas por el tribunal, para que personas que no hayan cometido delitos violentos no tengan que ingresar a la cárcel y
verse expuestos a ese ambiente.

 

Sobre el “acuerdo nacional” el
titular de Justicia dijo que es una propuesta para que a los reos que
padezcan de una enfermedad terminal con una esperanza de vida de seis
meses y a los tengan más de 80 años se les conceda la libertad.

 

Bulnes aseguró que esta medida
pretende “construir consenso político” y que la idea es no
discriminar a nadie para optar a este beneficio. De esta manera, los
violadores de derechos humanos también podrían acogerse a esta
medida.

 

El Vicepresidente Hinzpeter, quien el
año pasado se mostró contrario a todo tipo de indulto, mencionó
que las cárceles serán usadas para encerrar a los “delincuentes
más peligrosos”.

 

“Muchos de los cupos que tenemos en
las cárceles están siendo usado por reclusos no peligrosos o
quienes no tienen dinero para pagar la multa”, agregó Hinzpeter durante la ceremonia.