Termoeléctrica Pacífico: la denuncia que complica a Danús y Fontaine
El proceso de evaluación ambiental del proyecto Central Termoeléctrica Pacífico, ubicado en la primera región, no ha estado exento de problemas. El más reciente fue denunciado ayer por el senador PS Fulvio Rossi y el diputado comunista Hugo Gutié
El proceso de evaluación ambiental del proyecto Central Termoeléctrica Pacífico, ubicado en la primera región, no ha estado exento de problemas. El más reciente fue denunciado ayer por el senador PS Fulvio Rossi y el diputado comunista Hugo Gutiérrez: la intervención de manera “grosera” de parte del gobierno central para aprobar la iniciativa. ¿Cómo? Retirando el proyecto del Plan Regulador Intercomunal Costero de la Región de Tarapacá, presentado el 3 de diciembre de 2010, a sólo 4 días de haber sido ingresado. ¿La razón? El uso de suelo no permitía centrales de generación de energía, y por lo tanto, obstruía el camino de la inversión de 750 millones de dólares.
“Acá hay un intervención grosera del gobierno y del poder político para aprobar las centrales termoeléctricas que han presentado estudios de impacto ambiental”, aseguró Rossi. Para el diputado Gutiérrez, “solo parece primar el interés de los grandes consorcios transnacionales y de las empresas mineras y eso nos molesta profundamente”.
Pero, éste no es el único inconveniente que ha encontrado la iniciativa de la empresa Río Seco S.A, ligada a la conocida dupla empresarial Rodrigo Danús y Paul Fontaine -piezas clave en la campaña presidencial de Marco Enríquez-Ominami- por medio de South World Consulting (SWC). El 13 de noviembre de 2009, el proyecto ya había sido rechazado por la Corema de la región de Tarapacá por no cumplir con la normativa de carácter ambiental, específicamente con el sistema de aducción y descarga de agua de mar, que no fue detallado correctamente desde el principio.
Dos meses después, el 13 de enero de 2010, la empresa, por medio de su representante Erik Saphores, presentó un recurso de reclamación para intentar revertir el rechazo que ponía en jaque el millonario proyecto. Y para beneficio de Danús y Fontaine, el Consejo Consultivo de la Conama no sólo decidió acoger el recurso sino que terminó por invalidar la anterior decisión de la entonces Corema.
El 15 de octubre de 2010 se pronunció e incluso devolvió el proceso de evaluación ambiental al estado anterior al Informe Consolidado de Evaluación que motivó el rechazo del proyecto. Entonces, sólo quedaba un impedimento para la iniciativa: el ya citado plan regulador, que, sin embargo, habría sido sacado del camino como denunciaron los parlamentarios. Ahora, sólo queda esperar el veredicto de la Corema quien deberá decidir el próximo 17 de abril -en poco más de un mes- si finalmente le da el pase a la turbulenta Termoeléctrica Pacífico.