Girardi y rotulación de alimentos: "No se modificarán artículos que las empresas quieren"

Tras la decisión del Senado de postergar la votación del polémico proyecto de rotulado de alimentos con el objeto que éste sea discutido ahora en una comisión mixta, el presidente del Senado, Guido Girardi (PPD), lanzó una clara advertencia a los sectores que se opusieron tenazmente al contenido de la norma. 

“Si la Cámara de Diputados está de acuerdo vamos a tener una comisión mixta que va a restablecer solo dos puntos. No se van a modificar otros artículos que las empresas quieren“, afirmó el parlamentario tal como consigna radio Cooperativa. 

Además, confió su esperanza de “aprobar este proyecto el próximo martes con el respaldo de la UDI, y entonces el Ejecutivo tendría que ver si hay un veto aditivo, pero vamos a tener el proyecto que Chile necesita”.

En el tarde de ayer, la sesión en la que se discutía la iniciativa fue ampliamente seguida por los medios luego de la polémica entre quienes la apoyaba -básicamente el bloque Concertacionista- y quienes se opinían a parte de su contenido como el ministro de Salud, Jaime Mañalich y representantes empresariales. 

Así, mientras diferentes personeros de la oposición como Fulvio Rossi (PS) advertían sobre las presiones que se estaban ejerciendo desde el sector privado para evitar la aprobación del proyecto, Mañalich sostenía que el texto era “absurdo y completamente inaplicable“. La industria del sector, a través de un comunicado de la Sofofa y Chilealimentos, iba más allá asegurando que “la aprobación de esta iniciativa generará efectos negativos en la industria, como el cierre de plantas, pérdidas de trabajo y disminución de inversión en Chile“.

Los defensores de la propuesta aseguran que es indispensable mejorar no sólo el etiquetado de los alimentos sino que prohibir alguno de ellos en establecimientos educacionales, precisamente este último punto es de los más controvertidos -junto con la negativa a permitir la publicidad de productos como los sucedáneos de la leche materna- ya que, aseguran sus detractores, la idea más que prohibir debería ser informar a los consumidores.