El acuerdo entre Audax Italiano y Zalaquett que investiga Contraloría
Esta semana la Contraloría General de la República debiera pronunciarse sobre un tema que a estas alturas se ha transformado en clave para La Florida. No, no es la elección del alcalde titular.
Se trata del resultado de una investigación que zanjaría si el comodato que en 2005 permitió al club deportivo Audax Italiano S.A., quedarse con la administración del Estadio Bicentenario, se ajustó a la ley.
Esta semana la Contraloría General de la República debiera pronunciarse sobre un tema que a estas alturas se ha transformado en clave para La Florida. No, no es la elección del alcalde titular.
Se trata del resultado de una investigación que zanjaría si el comodato que en 2005 permitió al club deportivo Audax Italiano S.A., quedarse con la administración del Estadio Bicentenario, se ajustó a la ley.
Y es que la cesión del recinto por 30 años tiene preocupados a los floridanos, la hinchada del equipo, sus dirigentes y el mundo del fútbol, que ven con inquietud lo que pueda suceder con la localía del cuadro de colonia.
Pero el origen del conflicto se remonta seis años atrás, cuando el actual jefe comunal de Santiago, Pablo Zalaquett (UDI), encabezaba el concejo municipal. En esa época se establecieron las condiciones, responsabilidades y plazos que tendría el comodato para Audax Italiano.
En este sentido existían cláusulas que señalaban que en caso de incumplimientos o necesidades de la comunidad, la administración comunal podría terminar con el préstamo.
Sin embargo, una vez que se remodeló el estadio -en noviembre de 2008-, Zalaquett, con apoyo de la mayoría del concejo -excepto Jorge Gajardo, entonces alcalde, y Nicanor Herrera que se abstuvieron de votar- eliminó la disposición que establecía el fin anticipado del comodato, dejando al club deportivo con el control total del estadio por tres décadas. Todo eso, comentan en el municipio, sin pagar un peso.
Casi 12 mil millones
El costo del Bicentenario de La Florida para el Estado fue de más $11 mil 804 millones y según el concejal PS José Luis Alegría, su cesión a una sociedad anónima como Audax Italiano careció de legalidad. Ello, pues debió licitarse y no ser entregado a través de una asignación directa, como lo hizo el municipio.
Además, alega el miembro del concejo, los dirigentes que manejan la entidad no permiten que los habitantes de la comuna accedan al recinto con libertad. Por otra parte, cuestiona que las actividades extra deportivas -como recitales- generen ingresos que van a parar directamente a las arcas del club.
“Si Audax pretendía cobrarle 9 millones de pesos a la Universidad de Chile por cada vez que ocupara el estadio, por qué no le paga la mitad de eso mensualmente al municipio”, se pregunta Alegría, quien señala que el equipo podría arrendar el recinto tal como lo hace Coquimbo o Temuco.
De ahí que haya decidido recurrir a Ramiro Mendoza para que dirima si corresponde que una empresa tenga tal autoridad para manejar un “bien de uso público que fue construido con plata de todos los chilenos”.
Pero el militante del PS no recurrió solo a la Contraloría. Lo hizo con la venia de los demás concejales. De hecho, el UDI Rodolfo Carter reconoce que es necesario determinar si hubo algo “oscuro” en el comodato. No obstante, descarta que sea prudente tomar otras acciones legales como son las que evalúa realizar -junto a un grupo de vecinos- el militante socialista.
Por su parte el diputado PS Carlos Montes sostiene que ha habido un mal manejo de la propiedad del Estadio, pues el municipio no tiene control alguno del recinto y hoy en la práctica pertenece por completo a Audax Italiano.
Consultado por El Dínamo, Pablo Zalaquett optó por no referirse al conflicto hasta que exista una resolución del órgano revisor de cuentas. Eso sí, advierten, será por la vía legal.
El presidente de Audax, Ernesto Corona, en tanto, desestima las acusaciones, pero descarta referirse en profundidad a ellas y asegura “que le corresponde hacerlo al abogado del club, Jorge Guerrero”.
Como sea, dentro de los próximos días se sabrá quién tiene la razón… los concejales o Audax Italiano. Nuevamente en La Florida, la Contraloría tiene la palabra.