Lagarde tomó posesión de su cargo al frente del FMI

La ex ministra de economía francesaChristine Lagarde se convirtió hoy en la primera mujer que toma las riendas del Fondo Monetario Internacional (FMI), al asuma como nueva directora gerente del organismo.

Lagarde llegó a su nuevo trabajo en torno a las 09.00 hora local (08.00 hora chilena) en medio de una nube de fotógrafos y cámaras de televisión que la esperaban a la puerta del edificio del FMI, en Washington.

Tras acceder al interior de la sede, saludó formalmente al que ha sido director en funciones hasta hoy, el estadounidense John Lipsky, y también al decano del consejo ejecutivo, el egipcio Shakour Shaalan.

Aunque no tiene programados actos oficiales en su primera jornada y ha pospuesto su primer encuentro con la prensa hasta el miércoles, la nueva directora gerente sí posará para las cámaras a su llegada al organismo.

La ex ministra francesa se hace cargo de su puesto apenas cinco días después de que el Consejo Ejecutivo del FMI la seleccionara, el 28 de junio, como sustituta de Strauss-Kahn, quien renunció en mayo tras ser acusado de intentar violar a la empleada de un hotel neoyorquino.

En tanto, el FMI exigirá a su nueva directora gerente unos estándares de conducta y ética más exigentes que su predecesor, aunque anunció que también le pagará un 11% más, 467.940 dólares al año.

En el contrato difundido hoy por el FMI se especifica que Lagarde deberá seguir “los más altos estándares de conducta ética”, con “integridad, imparcialidad y discreción”, y deberá evitar cualquier “apariencia de conducta inapropiada”.

Ninguna de estas exigencias aparecían en el contrato que firmó Dominique Strauss-Kahn, a quien se le exigía como única condición “seguir los estándares de conducta aplicables al personal del FMI”.

A Lagarde también se le hace esta recomendación, pero además se le insta a participar “de vez en cuando en los programas de entrenamiento ético” que son obligatorios para el personal.

Salvo estas adiciones, los términos del contrato que firmó la francesa son prácticamente idénticos a los que rubricó su predecesor en septiembre de 2007, excepto en lo que respecta al salario que, según estipula, se irá ajustando conforme a la evolución de los precios en el área de Washington DC.

Strauss-Kahn firmó con un salario anual de 420.930 dólares, al que se sumaba un complemento de 75.350 dólares. Ahora, cinco años después, esta cuantía se ha visto elevada a 467.940 dólares, y la consignación adicional a 83.760 dólares.