Este es el despliegue que hoy hará la Confech para combatir a los encapuchados
Brigadas de vigilancia y comisiones de seguridad integradas por los mismos jóvenes intentarán evitar desmanes y actos vandálicos durante la manifestación que se realizará por las calles de Santiago.
Cuando a las 10:30 horas de hoy los principales dirigentes de la Confederación de Estudiantes (Confech) se reúnan en el frontis de la Universidad de Chile para encabezar una nueva marcha, un grupo de cinco a diez personas estará delante de toda la columna monitoreando la situación. Otros entremedio de la muchedumbre y algunos al final. Todos comunicándose de manera frecuente vía celular.
No serán carabineros ni agentes encubiertos, sino que jóvenes, miembros del Colegio de Profesores y de la Central Unitaria de Trabajadores (CUT), que buscarán impedir que encapuchados se infiltren en una manifestación que, a todas luces, buscará ser pacífica.
Así lo afirmó ayer el presidente de la Federación de Estudiantes de la Universidad Católica (Feuc), Giorgio Jackson, quien confía en que el operativo que se estrenará en unas horas podrá al menos contener los brotes de violencia que ya se vieron en las manifestaciones anteriores y que -a juicio de los estudiantes- han servido de excusa al gobierno para criminalizar el movimiento.
“Uno puede constatar que son menos del 0,5 por ciento los que están generando estos hechos de vandalismo”, dijo el dirigente, quien recalcó que insistirá en que los estudiantes debemos “empoderarnos frente a estos hechos porque somos muchísimos más”. Sin perjuicio de eso, Jackson precisó que a medida que la columna de manifestantes avance, se irán fijando perímetros de seguridad con banderines que permitan alertar de cualquier situación anómala.
Si bien el timonel de la Feuc expresó que en un principio estas acciones se coordinaban con Carabineros, él dejó de asistir a las reuniones que se realizaban en conjunto con la Intendencia, por lo que dijo desconocer si la policía uniformada estaba al tanto de estos procedimientos.
Desprestigio del movimiento
La decisión de crear estas “brigadas de vigilancia”, cobró fuerza luego que el Ministerio del Interior y Carabineros reconocieran el pasado 9 de agosto que había efectivos de la policía uniformada que durante las marchas actuaban de civil en labores de inteligencia. Una actividad que a ojos de los estudiantes y de la oposición está más ligada a los hechos de violencia que al control de ellos.
De hecho, la actuación de la policía de civil fue uno de los temas que ayer cruzó la sesión especial solicitada por la oposición en la Cámara de Diputados, en la cuál debió presentarse en ministro Rodrigo Hinzpeter, quien respaldó el accionar de Carabineros. “Nadie en Carabineros y en nuestro gobierno está efectuando acciones ilegales. Para cumplir funciones muchas veces han de actuar sin uniforme y eso se ampara en hechos legales”, sostuvo.
Los dichos del jefe de gabinete ayer no pasaron inadvertidos en la Confech, que insisten en que tanto los encapuchados como los policías infiltrados forman parte de una estrategia que busca deslegitimar la movilización.
El werken de la Federación de Estudiantes Mapuche, José Ancalao, expresó que el Ministerio del Interior por medio de muchas situaciones ha tratado de desprestigiar el movimiento estudiantil. “Creemos que es bastante irresponsable decir que los encapuchados son estudiantes, porque están encapuchados. Quién puede saber quiénes son”, dijo el joven, que aseguró que hoy la comunicación será mucho más fluida entre quienes monitorearán el avance de la marcha.
Comisión de seguridad
Uno de los puntos claves para delinear el operativo de seguridad que desplegará la Confech hoy fue el análisis del trazado que la Intendencia Metropolitana estableció para la marcha, que parte en Alameda con San Martín, para avanzar hacia el poniente hasta calle Exposición en Estación Central. Y de ahí hacia Blanco Encalada, desde donde se dirigirán hasta la facultad de Ciencias Físicas y Matemáticas de la Universidad de Chile, en calle Beaucheff para hacer un acto cultural.
La preocupación de la comisión de seguridad es, particularmente, el paso por el barrio Meiggs. Allí, comentan los encargados del equipo, podrían infiltrarse encapuchados o simplemente lumpen que busque generar problemas. Debido a esto es que ayer, junto con evaluar los nuevos anuncios del gobierno en materia de educación, los miembros de la Confech dedicaron gran parte de la tarde a debatir la conveniencia del trazado definido por la Intendencia.
Frente a la elaboración del dispositivo de seguridad para la marcha, la presidenta de la Federación de Estudiantes de la Universidad de Chile (Fech), Camila Vallejo, recalcó que nadie debe reaccionar ante los provocadores. “Eso le corresponde a Carabineros. Uno no puede llamar a los estudiantes a tirarse en contra de los encapuchados, no puedo hacerme responsable de eso”, subrayó la dirigenta. Está previsto que quienes visualicen la acción de infiltrados deben informar a Carabineros.
Los estudiantes secundarios también estrenarán este jueves una “comisión de seguridad” integrada por unos 200 alumnos de la Confederación Suiza, del Liceo Barros Borgoño, del Liceo de Aplicación y del Liceo 1.
“Los chicos principalmente se encargan de aislar el resto de la marcha con lo que esté pasando con los disturbios, proteger de que no empiecen los desmanes y que no estén haciendo desorden”, indicó la vocera de la Coordinadora Nacional de Estudiantes Secundarios (Cones), Paloma Muñoz.
La joven precisó que cualquier situación irregular que sea vista se va a denunciar. “Vamos a estar atentos. Ya quedó en evidencia lo que pasó en Valparaíso y Santiago donde se ha visto una cantidad enorme de carabineros subiéndose y bajándose de vehículos policiales estando de civil y encapuchados”, afirmó Muñoz, quien insistió en que serán minuciosos a la hora de controlar y denunciar cualquier conducta sospechosa a las autoridades.
Autoridades en alerta
La marcha de hoy no sólo ha generado inquietud entre los jóvenes sino que también en el Ejecutivo, que tras una serie de análisis concluyó que luego de dos meses de manifestaciones el movimiento estudiantil se “radicalizó”.
A raíz de eso se han reunido en más de una oportunidad en La Moneda el director de la Agencia Nacional de Inteligencia (ANI), Gonzalo Yuseff; los generales de Carabineros de Orden y Seguridad y de Inteligencia, Aquiles Blu y Bruno Villalobos, el subdirector operativo de la PDI, Juan Baeza y el subsecretario de Seguridad Pública, Cristóbal Lira.
Todos ellos han trabajado en generar un plan estratégico que permita contener los hechos de violencia que podrían producirse durante la manifestación.