Contraloría pide a la Cancillería investigar actividades políticas de Adolfo Zaldívar
El documento de tres páginas entregado a la Cancillería por el órgano contralor, responde a una solicitud de información realizada por los diputados Jorge Burgos y Juan Carlos Latorre, quienes hace algunas semanas solicitaron un pronunciamiento sobre los alcances de los principios de probidad administrativa y prescindencia política respecto a los embajadores.
A través del oficio 54207, fechado el 29 de agosto, la Contraloría General de la República solicitó al Ministerio de Relaciones Exteriores que inicie una investigación sobre la actividad política de sus embajadores, de modo de establecer si cumplen o no con la normativa interna que les impide realizar actos proselitistas durante sus horas de trabajo y mientras ejercen funciones de representación de Estado chileno.
El documento de tres páginas entregado a la Cancillería por el órgano contralor, responde a una solicitud de información realizada por los diputados Jorge Burgos y Juan Carlos Latorre, quienes hace algunas semanas solicitaron un pronunciamiento sobre los alcances de los principios de probidad administrativa y prescindencia política respecto a los embajadores.
La consulta, según explican a El Dínamo ambos parlamentarios, apuntaba al actual embajador de Chile en Argentina, Adolfo Zaldívar, quien en sus visitas al país se ha pronunciado en reiteradas oportunidades sobre contingencia política. Particularmente el pasado 22 de abril, el ex timonel DC, en entrevista a CNN, recordó su expulsión de la DC y criticó a la directiva que en ese entonces encabezaba la senadora Soledad Alvear, señalando que “no tuvo grandeza ni generosidad para ver los problemas que estaban en juego”.
En el oficio emitido por la Contraloría y tras consulta al Ministerio de Relaciones Exteriores se especifica que “los embajadores, en cuanto son funcionarios de esa secretaría de Estado, están impedidos de realizar cualquier actividad política dentro de la Administración, como lo sería hacer proselitismo o propaganda política…”
El texto agrega que los funcionarios, sin embargo, pueden ejercer sus derechos políticos cuando están al margen del desempeño de su empleo, “fuera de la jornada de trabajo y con con recursos y bienes propios”.
“La Contraloría es clara en cuanto a que se debe indagar el carácter y la oportunidad en que los funcionarios han realizado intervenciones políticos. Algunas de esas declaraciones se han hecho durante visitas al país, cuando han sido convocados a informar. Es la Cancillería la que debe establecer si se hicieron o no durante la jornada de trabajo”, señala el diputado Burgos.
“Corresponde al Ministerio de Relaciones Exteriores velar por el cumplimiento de los deberes antes expuestos, procediendo a investigar su eventual transgresión por parte de los funcionarios de que se trata, a fin de hacer efectiva la responsabilidad administrativa que pudiere afectarlos, especialmente en lo que respecta a la situación a que se refiere la consulta del rubro, informando a esta entidad de Control las medidas que adopte sobre el particular…”, señala la Contraloría al final del texto.