Dinosaurios del Cretáceo no encuentran dueño en una subasta en París
El animal, de más de once metros de largo y una tonelada de peso, vivió hace 75 millones de años (final del Cretáceo) en el actual estado de Montana, en Estados Unidos, y actualmente se conserva el 85 por ciento de su osamenta, además de la práctica totalidad de los huesos del cráneo, de casi un metro de diámetro.
Varios esqueletos de dinosaurios gigantes, en su mayoría del final del Cretáceo, se quedaron hoy sin adjudicar en una subasta de Sotheby’s con la que la casa pretendía ingresar hasta seis millones de euros.
De los 85 lotes que se subastaban, la pieza estrella era el esqueleto de un “Prosaurolophus maximus” con restos de piel momificada, uno de los pocos restos de dinosaurio que conservan parte de su tejido epidérmico, pero por el que nadie pujó, y que estaba valorado por Sotheby’s en más de 1,2 millones de euros.
El animal, de más de once metros de largo y una tonelada de peso, vivió hace 75 millones de años (final del Cretáceo) en el actual estado de Montana, en Estados Unidos, y actualmente se conserva el 85 por ciento de su osamenta, además de la práctica totalidad de los huesos del cráneo, de casi un metro de diámetro.
En la subasta le acompañó un dinosaurio “Tenontosaurus” del principio del Cretáceo, al que los arqueólogos han llamado “Clover el Combatiente” por haber protagonizado “un combate violento” con varios dinosaurios carnívoros, tal y como atestigua su cola de varios metros de largo seccionada en el transcurso de la contienda.
Tampoco éste, antecesor de los “Iguanodones”, tuvo mejor suerte en la venta y lo mismo ocurrió con dos dinosaurios voladores, los “Pteranodones Longiceps”, y un cráneo de “Triceratops”, herbívoro de cuerno frontal que compartió territorio y período histórico con el temido Tiranosaurio Rex.
Otra de las piezas que tampoco logró convencer, pero que Sotheby’s daba por seguras, fue un “Suuwassea Emiliae”, proveniente del Jurásico superior (anterior al Cretáceo), que fue un herbívoro de cuello largo pariente lejano de los Diplodocus.
El gigante, que mide 12,5 metros de la cabeza a la cola, es uno de los dos únicos ejemplares encontrados en el mundo de este dinosaurio que habitó el planeta hace 147 millones de años.
Entre otros seres que poblaron la Tierra antes del final de la era Mesozoica, Sotheby’s sacó a la venta un “Xiphactinus audax”, uno de los mayores peces predadores del Cretáceo, con mandíbula capaz de engullir de un solo bocado a presas de hasta dos metros y con talla cercana “a la de un minibús”.
Un cocodrilo del Jurásico, un cráneo de oso de las cavernas, tres huevos de dinosaurio o un colmillo de mamut fueron otros de los lotes, junto con un cuerno de dos metros de narval, especie protegida hoy en día.
Los asistentes a la venta pudieron, asimismo, adquirir varias colecciones de amonitas, minerales, meteoritos o mariposas.
Sotheby’s recordó que el récord alcanzado en una subasta de dinosaurios fue en 1997 con un Tiranosaurio Rex adjudicado por ocho millones de dólares (5,8 millones de euros).